MADRID, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
La ONG Oxfam Internacional denunció hoy que 1,3 millones de personas se hallan al borde de una grave crisis en Gaza por el bloqueo de la ayuda humanitaria, por lo que pidió a todos los implicados en el conflicto en los territorios palestinos que garanticen el paso de los alimentos, las medicinas y los suministros de agua que se necesitan de forma urgente.
Además, Oxfam Internacional pidió que la reapertura de las fronteras de Gaza se sitúe como punto prioritario de la agenda de la reunión que mantienen hoy en Egipto el presidente de Egipto, Hosni Mubarak, y el primer ministro israelí, Ehud Olmert, de manera que se permita la entrada de los suministros esenciales. "Si no es así, la economía y los servicios esenciales de la franja, como los sistemas de salud y de distribución de agua, se colapsarán", advirtió.
En opinión del director de Oxfam Internacional, Jeremy Hobbs, "la comunidad internacional está cerrando los ojos a sus obligaciones humanitarias y está permitiendo que se intensifique el sufrimiento. Sólo se permite que la ayuda entre con goteo. El confinamiento de Gaza es inaceptable. Pedimos que se resuelva una crisis que era totalmente evitable".
Citando datos de Naciones Unidas, la ONG alertó de que "sólo quedan alimentos para unos pocos días, el combustible escasea y los suministros de medicinas esenciales son críticamente bajos". "Se necesitan que entren en Gaza al menos cien camiones con ayuda humanitaria cada día, pero por ahora sólo se permite la entrada a veinte", señaló.
CRISIS SANITARIA
La CMWU, una organización palestina con la que trabaja Oxfam Internacional encargada de las obras de alcantarillado de Beit Lahia, asegura que la falta de equipos para llevar a cabo los trabajos está generando un alto riesgo de crisis sanitaria, ya que existe el peligro de que las obras se colapsen inundando con aguas fecales un área en el que viven 10.000 personas y contaminando el suministro de agua de otras 300.000.
"La CMWU lleva tres meses esperando la llegada de equipos por valor de 370.000 euros. Sólo queda cloro potabilizador para diez días y la población se puede ver obligada pronto a beber agua contaminada", manifestó el director de Oxfam Internacional.
Para Hobbs, "retener ayuda humanitaria como arma política está provocando un sufrimiento inconfesable a toda la población. Es una vergüenza para toda la comunidad internacional. Los equipos para el tratamiento de agua llevan más de tres meses esperando en la frontera de Gaza. Estas sanciones deben terminar inmediatamente".
El director de la ONG manifestó su preocupación por que las conversaciones de hoy en Sharm el Sheik (Egipto) puedan ignorar las "necesidades humanitarias extremas que tiene la población de Gaza", por lo que hizo un llamamiento a Olmert para que levante el bloqueo inmediatamente y pidió a las autoridades palestinas que garanticen que los trabajadores de los servicios públicos y las agencias humanitarias pueden distribuir los suministros que se necesitan "urgentemente".
