JARTUM, 21 May. (Reuters/EP) -
El principal grupo detrás de las protestas en Sudán ha llamado este martes a una huelga general, afirmando que las dos últimas sesiones de negociación nocturna con el Ejército no han permitido llegar a un acuerdo sobre cómo dirigir el país después de la caída del expresidente Omar Hasán al Bashir.
La llamada Declaración de las Fuerzas de la Libertad y el Cambio, que aglutina a partidos de oposición y a la Asociación de Profesionales de Sudán (APS, promotora de las protestas contra Al Bashir desde diciembre) reclama que sean civiles quieres encabecen el nuevo Consejo Soberano que deberá dirigir los tres años de periodo de transición hacia la democracia.
Según la APS, el Ejército sigue insistiendo en dirigir la transición y mantener una mayoría militar en el consejo. "El poder civil significa que la estructura es plenamente civil con una mayoría civil en todas sus partes", ha sostenido la asociación en un comunicado, adelantando que sus miembros se movilizarán para una huelga, sin dar una fecha.
El punto muerto en las conversaciones ha echado por tierra las esperanzas de una rápida recuperación de la crisis política en el país, que tuvo su momento álgido el 11 de abril, cuando el Ejército forzó a Al Bashir a dejar el cargo tras 30 años en el poder.
Al frente del país quedó un Consejo Militar de Transición (CMT), que prometió entregar el poder a un gobierno tras la celebración de elecciones en el plazo de dos años.
Sin embargo, los manifestantes quieren garantías de un control civil. El Ejército ha reconocido esta madrugada que la composición del Consejo Soberano sigue siendo el principal punto de fricción pero no ha entrado en detalles respecto a su posición.
"A sabiendas de nuestra responsabilidad histórica, trabajaremos para llegar a un acuerdo urgente (...) que cumpla las aspiraciones del pueblo sudanés y los objetivos de la gloriosa revolución de diciembre", ha asegurado la junta militar en su comunicado, en el que no ha aclarado cuándo se reanudarán los contactos.
