OSCE.- Zapatero pide el "consenso" sobre el Tratado de Fuerzas Convencionales en Europa del que se ha desvinculado Rusia

Actualizado: jueves, 29 noviembre 2007 12:14

Anima a la OSCE a jugar un mayor papel en la lucha contra el terrorismo y a contribuir a la Alianza de Civilizaciones

MADRID, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, hizo hoy un llamamiento al "consenso" a los países miembro de la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE) en torno al Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE) sobre el que Rusia ha decretado una moratoria en su aplicación, subrayando que es la "piedra angular" para la paz y la seguridad en Europa.

Asimismo, durante su discurso en la inauguración del consejo ministerial de esta organizacón en Madrid, animó a los 56 Estados miembro a que desempeñen un mayor papel en la lucha contra el terrorismo y a contribuir a la iniciativa de la Alianza de Civilizaciones.

"La OSCE nos ha aunado en el esfuerzo de la construcción de una Europa en paz consigo misma", resaltó Zapatero, por ello, agregó, "la diversidad existente entre nosoros y la metodología de de este foro no son obstáculos para avanzar en la colaboración ya sea en los Balcanes, la resolucion de los conflictos congelados, el afianciamiento de las cotas de seguridad del espacio OSCE o el fortalecimiento legal de la organización".

En este sentido, agregó, "es necesario que recompongamos el consenso sobre el Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE) , piedra angular de la paz, la estabilidad y nuestra seguridad", aseveró. El presidente del Gobierno hacía así un llamamiento implícito tanto a Rusia como a Estados Unidos a que superen sus diferencias sobre esta cuestión, después de que Moscú decidiera suspender la aplicación del tratado por los planes de Washington de desplegar un escudo antimisiles en Republica Checa y Polonia.

Por otra parte, agregó Zapatero, "juntos también podemos hacer frente a las nuevas amenazas y vencer el terrorismo" , del que, dijo, " ningún país ni ningún ciudadano están a salvo". En este sentido, subrayó que España tiene "una dolorosa experiencia" y ha sido objeto de "ataques terroristas en sus más variadas formas y sus más dispares autores". Pero, resaltó, "también hemos sabido utilizar la fuerza del estado de derecho para juzgar a los culpables".

COLABORACIÓN EN LA LUCHA CONTRA EL TERRORISMO

La OSCE, subrayó, "está llamada a colaborar más estrechamente para frenar sus embates que dejan tras de sí un rastro de dolor y sufrimiento". "Queremos que sea ambiciosa en materia de lucha contra el terrorismo" pero también "su mayor atención y reconocimiento a las víctimas".

Asimismo, el presidente del Gobierno hizo especial hincapié en su intervención a la labor de la OSCE en la lucha contra las mafias y el tráfico de personas, resaltando la "sensibilidad" con la que España, antes "país de inmigración y ahora país receptor", ha sabido abordar los flujos migratorios.

También alabó la relación que plantea la organización entre "seguridad y medio ambiente", un debate que, dijo, la presidencia española durante 2007, "ha potenciado". El Gobierno español, precisó, "está comprometido con el desarrollo sostenible, el equilibrio ecológico y las medidas para frenar el cambio climático". Estas medidas, resató, pueden generar "nuevas actividades económicas y nuevos yacimientos de empleo". En todo caso, este problema requiere "la acción concertada de toda la comunidad internacional".

"La historia de la OSCE y de la modernidad de España van de la mano", afirmó Zapatero, que explicó que "al asumir la presidencia hemos aportado nuestra experiencia democrática". También ha aportado, agregó, "la vitalidad de la sociedad española y el ejemplo de la profunda progresión económica, social y cultural" lograda en las tres últimas décadas y que han permitido a los españoles una "convivencia en paz y libertad".

ALIANZA DE CIVILIZACIONES

Zapatero también aprovechó para sumar apoyos a su iniciativa de la Alianza de Civilizaciones, cuyo objetivo, dijo es "gestinar la diversidad y reforzar la seguridad global mediante el respeto mutuo". En este sentido, incidió, "la OSCE puede contribuir de manera significativa y valiosa" puesto que ha demostrado ser "una herramienta de incuestionable valor para construir un espacio euroasiático de paz y seguridad compartidas".

Por otra parte, reconoció que "nuestro espacio geopolítico está cambiando y con él debe evolucionar también nuestra organización", si bien no dejó claro si España apoya una reforma de la OSCE como defiende Rusia.

Por último, expresó su deseo de que "la conferencia ministerial de Madrid sea todo un éxito porque será el triunfo de todos". "Estoy convencido de que todos ustedes encontrarán en su tarea la voz armónica del consenso, voz necesaria para afrontar con mayor certidumbre el futuro común y para colmar nuestras esperanzas", agregó.

"Estoy convencido de que Madrid, España, es un buen lugar para dialogar, para entenderse y para mirar hacia un futuro compartido", concluyó.

Durante la intervención de Zapatero, en la mesa presidencial había dos asientos vacíos correspondientes a los representantes de Bélgica y Finlandia --países que constituyen la 'troika' junto con España al ser la presidencia anterior y la siguiente de la OSCE--. Fuentes diplomáticas españolas explicaron que por un error de la organización estos dos representantes desconocían que debían ocupar estos asientos en la sesión inaugural.