De Hoop Scheffer quiere libre movimiento de tropas y sigue trabajando para nuevas aportaciones
RIGA, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) analizarán hoy la situación en Afganistán y debatirán si su operación en el país (ISAF) debe centrarse únicamente en la seguridad o si sus objetivos deben extenderse también ámbito del desarrollo. Asimismo, el secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer, insistirá en que las tropas europeas estén disponibles para trasladarse a cualquier punto en "caso de emergencia".
Afganistán es el tema principal de la Cumbre de la OTAN en Riga y previsiblemente el único punto que tratarán los líderes en la cena con que dará comienzo mañana, donde se espera un intercambio "franco" de puntos de vista sobre la situación del país, explicó De Hoop Scheffer la semana pasada en Bruselas.
El secretario general insistirá en la necesidad de que los países levanten las reservas con las que enviaron sus tropas a Afganistán para dar potestad al comandante de la ISAF para determinar cambios destacamento en los casos en los que situaciones de "emergencia" requieran que unos contingentes asistan a los de otros países en zonas distintas a su emplazamiento originario.
La ISAF está formada por unos 30.000 soldados, repartidos en cinco comandancias regionales --Kabul, norte, oeste, sur y este--. Las fuerzas españolas ascienden a cerca de 700 efectivos, destacados en Herat, al oeste del país.
La semana pasada, De Hoop Scheffer reclamó que todas las tropas, sean del país que sean, estén en permanente disposición de desplazarse a cualquier lugar del país en la que se registre una "situación de emergencia" que requiera refuerzos. Para ello, es necesario acabar con las reservas que en algunos países, como España, se fijaron para enviar tropas a Afganistán.
En rueda de prensa celebrada ayer en Riga, indicó también que sigue trabajando para lograr un mayor compromiso de los aliados que se traduzca en el envío de más tropas, tal y como requieren países como Estados Unidos.
De Hoop Scheffer considera que "en caso de emergencia cada aliado debería estar dispuesto a ayudar a los otros" sin señalar territorios concretos porque, dijo, "no es una cuestión de norte y sur, sino del conjunto de Afganistán".
Aunque comprendió que "en algunos países los parlamentos tienen mucho que decir en el envío de fuerzas al extranjeros", insistió en la eliminación de las restricciones que consideró "más importante que llevar fuerzas nuevas" para hacer frente a situaciones difíciles.
No quiso centrar su petición hacia ningún aliado, porque, según dijo, "todo el mundo está de acuerdo, incluido España o Alemania, en que si hay que hacer frente a situaciones de urgencia todo el mundo debería poder moverse", algo que consideró "factible".
Sin embargo, fuentes del Gobierno indicaron ayer a Europa Press que el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero no se plantea aumentar el número de tropas en Afganistán ni el nivel de responsabilidad actual que desempeña dentro de la ISAF, pese a la insistencia de Estados Unidos.
SEGURIDAD Y DESARROLLO
Por otra parte, los líderes debatirán cómo enfocar la presencia de la OTAN en este país. Estados Unidos o Reino Unido apuestan por fomentar el aspecto de la seguridad, con más fuerzas -con el levantamiento de reservas y contingentes nacionales- y otros como España, Noruega o Países Bajos creen que el ritmo de las operaciones "deben acompasarse a una realidad afgana que es compleja" y estiman que la reconstrucción y el desarrollo "deben acompañar" la política de seguridad.
En opinión de De Hoop Scheffer, "la OTAN no es una agencia humanitaria, no nos ocupamos de desarrollo, no somos una ONG" y apuesta por la colaboración entre las distintas organizaciones internacionales, también la Alianza Atlántica, pero cada una centrada en su misión.
El Ejecutivo español estima que la reconstrucción y el desarrollo son dos elementos muy importantes que deben acompañar la política de seguridad. En este sentido, el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, reconoció el pasado 20 de octubre en el Congreso de los Diputados que en Afganistán "se ha revuelto el avispero" de los talibán y que existe "un recrudecimiento de la violencia general" de facto.
