MADRID, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
Oxfam Intermón ha hecho un llamamiento este viernes a los países occidentales y a los estados más ricos para que abran sus fronteras a los tres millones de refugiados sirios, ya que solo el 0,16 por ciento de ellos, unas 5.000 personas, ha logrado establecerse en países no vecinos de Siria.
La prolongación del conflicto en Siria ha provocado un aumento del número de sirios que han tenido que abandonar su país y dirigirse hacia naciones vecinas como Jordania, Turquía y Líbano. Sin embargo, esto ha hecho que mermen los recursos de estos estados y también de las organizaciones internacionales, que cada vez cuentan con menos fondos para atender a las necesidades de los refugiados.
La portavoz de la respuesta de Oxfam Intermón a la crisis de Siria, Lourdes Benavides, ha instado a la comunidad internacional a "incrementar su apoyo y trabajar con Naciones Unidas para ofrecer pronto socorro a las familias más vulnerables". Benavides también ha calificado como "inconcebible" que "los países ricos hayan acogido a tan solo 5.000 de los tres millones de refugiados registrados".
La ONG ha advertido de que el número de refugiados seguirá creciendo si no cesan las hostilidades y que este problema requiere una acción adecuada y responsable. "Sin un apoyo sostenible que permita mejorar la respuesta humanitaria y el reasentamiento de los refugiados más vulnerables, el futuro se muestra muy incierto", ha precisado la portavoz de Oxfam Intermón.
Según la ONG, dentro del país hay 10,8 millones de personas que necesitan ayuda y muchas familias carecen de ingresos para mantenerse y sus miembros tampoco tienen esperanzas de encontrar un empleo.
Hasta ahora, los sirios han buscado refugio principalmente en Jordania, Líbano y Turquía, aunque en los últimos meses también han empezado a acusar las consecuencias de los desplazamientos. Oxfam Intermón, que trabaja con los refugiados sirios en Jordania, ha suspendido su ayuda con dinero en efectivo a cerca de 6.500 refugiados sirios por falta de fondos.
Un carencia que también denuncia Naciones Unidas. La ONU tuvo que reducir su llamamiento de los 4.200 millones de dólares (más de 3.100 millones de euros) hasta los 3.740 (cerca de 2.900 millones de euros), ante la falta de compromiso de los donantes.
