ISLAMABAD, 15 Sep. (EP/AP) -
El partido gubernamental de Pakistán, al que pertenece el actual presidente, el general Pervez Musharraf, ha encontrado la fórmula para renovar su mandato presidencial de cinco años, según admitieron hoy fuentes del partido que aseguraron que los comicios para elegir al próximo jefe de Estado se celebrarán en la primera semana de octubre.
Asimismo, incidieron en que el anuncio de la fecha oficial de las elecciones presidenciales por parte de la Comisión Electoral del país, será inminente, un día después de que ayer la ex primera ministra Benazir Bhutto, anunció que regresará a Pakistán el próximo 18 de octubre para poner fin a ocho años de exilio, presentarse a las elecciones parlamentarias, previstas para enero de 2008, y contribuir a restaurar la democracia en Pakistán.
"En lo que al partido gubernamental respecta, hemos concluido la estrategia para elegir al presidente durante otro mandato de cinco años. Tenemos los suficientes votos para elegir fácilmente al presidente Musharraf para otro mandato", aseguró Azeem Chaudhry, destacado dirigente del partido la Liga Musulmana de Pakistán-Q.
Según explicaron otros dos miembros del partido, que apelaron al anonimato, incidieron en que la votación presidencial tendrá lugar la primera semana de octubre, mucho antes de que expire oficialmente el mandato actual de Musharraf el 15 de noviembre. El jefe de Estado es elegido por un colegio electoral integrado por los diputados nacionales y provinciales.
Chaudhry explicó que, durante las negociaciones entre Musharraf y Bhutto para compartir el poder, la ex primera ministra exigió demasiadas condiciones a cambio de apoyar la reelección de Musharraf, que incluiría la introducción de una enmienda constitucional para permitir que Bhutto pudiera acceder a un tercer mandato como jefa del Ejecutivo, hasta ahora limitados por la Carta Magna a dos. "Si lo hacemos, enviará una señal de que Benazir Bhutto es la futura primera ministra, y en tal caso ¿quién nos votará?", se preguntó Chaudhry.
Por su parte, miembros del partido gubernamental, reconocieron a la agencia AP, que las negociaciones entre Bhutto y Musharraf han provocado una división interna en el partido del presidente, por el temor a que un acuerdo eventual entre ambos reste votos a la Liga Musulmana de Pakistán-Q.
