BUDAPEST, 2 Jul. (Reuters/EP) -
El Parlamento de Hungría ha aprobado este martes una ley que permitirá aumentar el control estatal en organismos de investigación gestionados por la Academia húngara de Ciencias, una norma que llega a pesar de las protestas de manifestantes que denuncian que supone un paso más en el creciente control gubernamental de la vida pública.
Desde que llegó al poder en 2010, el primer ministro húngaro, Viktor Orban, ha impulsado una politización de los tribunales, los medios de comunicación y las universidades, enfrentando a su Ejecutivo con la Unión Europea por su comportamiento en materia de Estado de derecho.
La nueva ley retira a la Academia de Ciencias, una institución con 200 años de historia, su red de organismos de investigación, que pasan a depender de un comité presidido por una persona nombrada por Orban y en el que la mitad de sus miembros proceden del Gobierno.
El impulsor de la norma, el ministro de Tecnología e Innovación, Laszlo Palkovics, ha justificado los cambios que impone la ley por la necesidad de "garantizar un impulso sostenible a la competitividad a largo plazo de Hungría y a un uso más eficiente de los recursos".
Palkovics será a partir de ahora el presidente del consejo de once miembros que asignará los fondos destinados a la Academia de Ciencias y supervisará su empleo. El Gobierno gestionará por separado los institutos de investigación y podría crear nuevos centros o clausurar alguno de los existentes.
Orban será quien nombre al jefe del consejo de investigación, basándose en la recomendación conjunta del ministro Palkovics y el presidente de la Academia húngara de Ciencias.
El presidente de esta institución, Laszlo Lovasz, ha dicho que el aumento del control estatal en el sector de la investigación científica es inaceptable y ha anunciado que recurrirá la ley ante el Tribunal Constitucional.
"Uno de los aspectos altamente problemáticos es la excesiva influencia del Gobierno según los estándares europeos", dijo el presidente de la Academia húngara de Ciencias, en una entrevista concedida a Reuters en junio.
Miles de húngaros han tomado las calles para protestar por los cambios en materia de investigación y presupuestos y este martes tienen convocada una nueva movilización para expresar su rechazo a los planes del Gobierno de Orban.
La Comisión Europea ha dicho que supervisará el sistema público de investigación de Hungría y ha emplazado a las autoridades a "abstenerse de adoptar cualquier decisión que restrinja la libertad académica y científica".
Los grupos de oposición acusan a Orban de estar intentando imponer un creciente autoritarismo y el dominio de un único partido en la vida pública y en la escena política.
