LA HAYA 16 May. (EP/AP) -
La diputada holandesa de origen somalí Ayaan Hirsi Ali anunció hoy que dimite de su cargo y que abandonará el país después de que el Ministerio de Inmigración revelara que había recibido la ciudadanía holandesa de forma inadecuada.
Hirsi Ali indicó que había tomado anoche la decisión después de que la ministra de Inmigración, Rita Verdonk, le dijera que "me privaría de mi ciudadanía holandesa". "Por tanto, me estoy preparando para abandonar Países Bajos", señaló a la prensa en La Haya.
Hirsi Ali falsificó su nombre y su fecha de nacimiento en su solicitud de asilo cuando llegó a Países Bajos en 1992, por temor a represalias de su familia después de huir de un matrimonio acordado. La hasta ahora diputada consiguió un pasaporte en 1997 y admitió la falsificación en 2002 cuando se vetó su candidatura al Parlamento.
Entonces no se produjeron objeciones, pero después de que un programa de televisión volviera a airear el asunto la semana pasada, Verdonk consideró que su naturalización no se había hecho de forma adecuada.
El viceprimer ministro, Gerrit Zalm, que era el líder del VVD partido al que pertenecía Hirsi Ali en 2002, también participó en la rueda de prensa de hoy y se declaró "sorprendido de la rapidez" con la que Verdonk tomó la decisión. "Si vuelve a solicitar la ciudadanía, confío en que su solicitud será tratada con la misma urgencia", afirmó.
Hirsi Ali se hizo internacionalmente conocida cuando el cineasta Theo van Gogh fue asesinado en noviembre de 2004, ya que había escrito el guión de su película 'Sumisión', que criticaba el trato de las mujeres bajo el Islam y ofendió a muchos musulmanes. La diputada recibió muchas amenazas de muerte, incluida una dejada por el asesino de Van Gogh en su cuerpo, y ha estado bajo protección policial desde entonces.
El Gobierno holandés ha tenido problemas para encontrarle nuevo alojamiento después de que sus vecinos en La Haya se quejaran con éxito el mes pasado de que las medidas de seguridad para la diputada se habían vuelto insoportables para ellos. "Es difícil vivr con tantas amenazas contra tu vida y tal nivel de protección política", declaró Hirsi Ali hoy. "Es difícil trabajar como una parlamentaria si no tienes dónde vivir, todo eso es difícil pero no imposible, pero se volvió imposible anoche", añadió.