El portavoz legal de Mursi dice que el juicio tiene motivos políticos

Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 21:57

MADRID, 1 Nov. (EUROPA PRESS) -

   El portavoz legal del expresidente egipcio Mohamed Mursi, derrocado el 3 de julio a través de un golpe de Estado, ha reiterado este jueves que el juicio contra él por incitación al asesinato y provocación de derramamiento de sangre tiene motivos políticos y carece de pruebas.

   "No ha pruebas en el juicio contra Mursi previsto para el 4 de noviembre. Más allá del informe de investigación de seguridad y los informes de investigaciones criminales, no hay pruebas disponibles", ha dicho Mohamed el Damati, según ha informado el diario egipcio 'Al Ahram'.

   "El juicio contra Mursi debería estar guiado por ciertas condiciones, en base a la Constitución de 2012 --aprobada por referéndum y suspendida tras el golpe de Estado--. La Constitución dice claramente que dos tercios del Parlamento deben aprobar el juicio, que ha de ser celebrado ante el presidente del Tribunal de Apelaciones", ha recordado.

   Por último, El Damati ha manifestado que el equipo de defensa aún no sabe si acudirá al juicio, ya que Mursi ha rechazado reconocer la autoridad del tribunal y se ha negado a contar con representación legal. "Mursi se sigue considerando el presidente electo legítimo de Egipto", ha remachado.

   El golpe de Estado se produjo tras la reiterada negativa del expresidente a presentar su dimisión en el marco de manifestaciones multitudinarias contra su mandato, alegando que se trataba de un mandatario electo y de la existencia de manifestaciones también en su favor, si bien estas fueron de menor calado.

   Por su parte, el Ejército asegura que su actuación respondió a la voluntad de la población, que había tomado las calles para protestar contra el mandato de Mursi.

   Hermanos Musulmanes se ha negado en múltiples ocasiones a reconocer la legitimidad de las autoridades surgidas tras el derrocamiento del expresidente, miembro de la organización islamista, y ha sostenido que el nuevo gobierno es de tinte golpista.

   Asimismo, ha denunciado la existencia de una campaña de persecución contra la formación con el arresto de decenas de sus miembros, entre ellos los integrantes de su cúpula, y la represión de las manifestaciones celebradas tras el derrocamiento de Mursi, que se han saldado con más de un millar de muertos a causa de la actuación de las fuerzas de seguridad.