El presidente de la comisión parlamentaria del 'Brexit' defiende que el Parlamento vote el acuerdo con la UE

Banderas de Reino Unido y la Unión Europea frente al Big Ben de Londres
NEIL HALL/REUTERS
Actualizado: jueves, 20 octubre 2016 11:11

LONDRES, 20 Oct. (Reuters/EP) -

El presidente de la comisión parlamentaria sobre el 'Brexit', Hilary Benn, ha defendido este jueves que el Parlamento británico debe votar sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea, una medida a la que se opone radicalmente el Gobierno, que alega que no se puede contradecir una decisión ya tomada por los ciudadanos.

La primera ministra británica, Theresa May, ha dicho que invocará el Artículo 50 antes del mes de marzo de 2017, lo que dará comienzo a un proceso de "divorcio" con la UE que durará cerca de dos años. May ha declarado en numerosas ocasiones que los parlamentarios podrán debatir sobre los planes del Gobierno en este aspecto, pero ha rechazado por completo la posibilidad de que el Parlamento vote a favor o en contra de dicho proceso.

Benn, miembro del Partido Laborista y presidente de una comisión formada para supervisar las labores del Gobierno en relación con el proceso de separación de la UE, ha dicho este jueves que es "inconcebible" que los parlamentarios británicos no puedan votar sobre el acuerdo final de salida de Reino Unido del bloque.

"Estoy seguro de que el Parlamento querrá tener voz a la hora de supervisar las negociaciones cuando sean publicadas, pero también estoy convencido de que el Parlamento querrá poder tomar una decisión sobre el acuerdo final", ha explicado Benn en una entrevista con BBC Radio.

"Es inconcebible que el Parlamento no haga uso de su soberanía para determinar cuál es su postura sobre el acuerdo una vez esté finalmente completada", ha señalado.

Varios parlamentarios contrarios al 'Brexit' han llegado a tomar medidas legales contra May y el Gobierno, ya que alegan que el Ejecutivo británico no tiene la autoridad suficiente para invocar el Artículo 50 del Tratado de Lisboa --un trámite necesario para que un país miembro deje de formar parte de la UE-- sin el apoyo explícito del Parlamento.