Archivo - El presidente de Uganda, Yoweri Museveni (archivo) - XINHUA / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO - Archivo
MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, ha destacado este viernes las "buenas discusiones" mantenidas con su homólogo de Sudán del Sur, Salva Kiir, en el marco de su visita oficial al país africano, sumido desde hace semanas en un repunte del conflicto y una crisis política que han llevado a Kampala a enviar tropas a territorio sursudanés, en medio de los temores sobre un posible colapso del acuerdo de paz de 2018.
"Mantuve ayer buenas discusiones con el presidente Salva Kiir en Yuba. Abordamos asuntos clave sobre paz, seguridad y el contexto socioeconómico, particularmente sobre cómo armonizar nuestras políticas comerciales y potenciar el comercio transfronterizo entre ambos países", ha señalado en su cuenta en la red social X, donde el jueves expresó su deseo de "mantener discusiones destinadas a reforzar las relaciones bilaterales e intensificar la cooperación entre ambas naciones".
El ministro de Exteriores de Sudán del Sur, Ramadán Mohammed Abdallah Goc, ha confirmado que la reunión estuvo centrada en "reforzar las relaciones bilaterales entre Yuba y Kampala", antes de agregar que "también se abordaron acontecimientos políticos apremiantes", sin más detalles al respecto, según ha recogido la emisora sursudanesa Eye Radio.
El Gobierno sursudanés confirmó a mediados de marzo el despliegue de tropas ugandesas en el país para apoyar al Ejército en plena crisis política, días después de negar que Kampala hubiera enviado estas fuerzas, tal y como había anunciado el jefe del Ejército ugandés, Muhoozi Kainerugaba, hijo de Museveni.
La visita de Museveni llega después de que sendas misiones de mediación de la Unión Africana (UA) y la Autoridad Intergubernamental sobre el Desarrollo (IGAD) se desplazaran durante los últimos días a Yuba para intentar rebajar las tensiones, especialmente después de que el antiguo líder rebelde y ahora vicepresidente primero, Riek Machar, fuera puesto bajo arresto domiciliario.
El ministro de Información sursudanés, Michael Makuei Lueth, acusó la semana pasada a Machar de instigar una rebelión en el país y de obstaculizar los avances de cara a celebrar elecciones a través de su supuesto apoyo a una milicia que tomó hace varias semanas una localidad en Nilo Alto, en la frontera con Etiopía, pese a que el Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán-En Oposición (SPLM-IO) se ha desvinculado de estos combates.
De hecho, el vicepresidente del SPLM-IO y presidente del Parlamento de Sudán del Sur, Oyet Nathaniel, había anunciado previamente la "abrogación" del acuerdo de paz de 2018 tras la puesta de Machar bajo arresto domiciliario, al tiempo que aseveró que la decisión de las autoridades sursudanesas "pone en grave peligro las perspectivas de paz y estabilidad en Sudán del Sur".
La crisis tiene lugar después de que el presidente de Sudán del Sur promulgara en septiembre de 2024 una enmienda a la Constitución de 2011 para extender otros dos años el periodo de transición, una medida criticada por la comunidad internacional, que reclamó a Yuba avances para la aplicación de la totalidad del acuerdo de paz de 2018, dado que aún no se han materializado algunos de los compromisos, incluida la celebración de elecciones.