EL CAIRO/DUBAI, 14 May. (Reuters/EP) -
Un grupo "de vigilancia" vinculado a Al Qaeda en Mukalla, en el este de Yemen, ha decretado una prohibición sobre el comercio del qat, una droga narcótica muy preciada en el país, en una señal que muestra el creciente poder policial del grupo en medio de la guerra civil del país.
El vacío de seguridad en el este de Yemen está dando a Al Qaeda una gran libertad para imponer sus normas sociales y realizar detenciones, según han apuntado algunos residentes.
Un nuevo grupo de tribus armadas y clérigos suníes ha tomado el control de muchas partes de la provincia de Hadramaut, rica en petróleo, después de que las unidades militares la abandonasen el mes pasado.
La llamada "dirección de seguridad", que según las autoridades está compuesta por miembros de Al Qaeda, emitió el jueves una prohibición sobre el qat, una droga cultivada en Yemen con efectos parecidos a la anfetamina, provocando la difusión en las redes sociales de imágenes de milicianos al lado de hojas del cultivo en llamas.
Las nuevas autoridades de Hadramaut han dado a los combatientes de Al Qaeda una libertad sin precedentes para organizar manifestaciones y llevar armas en público, según los residentes. "Tienen un tribunal islámico, la gente va a ellos para presentar quejas y estos envían coches de patrulla, aunque hasta ahora no se han entrometido en la vida privada", ha detallado Salem Abdulá, un residente de Mukalla.
La coalición liderada por Arabia Saudí se enfrenta desde hace semanas con los rebeldes huthis, quienes por el momento controlan grandes zonas del país más pobre de la Península Arábiga y están avanzando hacia Hadramaut, la mayor provincia de Yemen.
EVITAR CONFLICTOS INTERNOS
El cuerpo que controla la provincia, el Consejo de Académicos Islámicos, ha involucrado a Al Qaeda en la Administración local para evitar luchas internas, según ha informado una fuente que ha preferido conservar el anonimato. "No tenemos otra opción que llegar a un acuerdo con estos elementos, ya que de otra forma habría una confrontación que nos conduciría a la guerra, la destrucción y las muertes de civiles", ha asegurado.
Las tensiones por el mayor papel de los milicianos han aumentado en Mukalla. Un vídeo publicado en Internet la semana pasada mostraba a cientos de personas coreando en una manifestación: "No a Al Qaeda, no a los huthis".
La rama de la milicia en Yemen, Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA), lleva años cometiendo ataques en instalaciones estatales del país. Estados Unidos ha mostrado su preocupación sobre que la guerra civil en Yemen facilite la expansión de AQPA.
