BARCELONA, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las siete familias adoptantes españolas que se encuentran con sus niños en la capital de la República del Congo, Brazzaville, serán trasladadas a la capital de la vecina República Democrática del Congo (RDC), Kinshasa, con el objetivo de "facilitar" su retorno a España.
Según explicaron a Europa Press fuentes de la Conselleria catalana de Bienestar y Familia, el funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores encargado de agilizar la salida de estas familias partió esta mañana de Madrid y se espera que se reúna con las familias esta misma noche.
Por iniciativa del Gobierno catalán, el grupo de familias pasaron la noche anterior en un hotel de Brazzaville, pero entre esta noche y mañana podrían trasladarse a Kinshasa donde "seguramente sería más fácil volver" a España. Los ciudadanos europeos disponen de mejores conexiones aéreas en Kinshasa que en Brazzaville y el aeropuerto de la primera capital está controlado por tropas internacionales de la ONU.
Además, en la citada ciudad deberían recoger a uno de los menores adoptados --el único que no se encuentra con su nueva familia--, que está en un orfanato de Kinshasa, tras los problemas que sufrieron las parejas adoptantes, cinco catalanas y dos vascas, a la hora de tramitar el visado de los niños.
El objetivo del funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores es el de coordinar las labores de asistencia y retorno a España de las familias españolas junto con los menores adoptados.
En base a la duración del viaje de hoy y a los trámites tanto en Brazzaville como en Kinshasa (ambas capitales están separadas por los ocho kilómetros del ancho del río que les divide), los visados de salida hacia España podrían estar listos "en unos días", indicaron esta mañana fuentes diplomáticas españolas a Europa Press.
La tregua pactada ayer entre los soldados y partidarios de los rivales en las presidenciales de la RDC, Joseph Kabila y Jean Pierre Bemba, después de tres días de enfrentamientos, ha permitido la apertura de las fronteras entre ambos países así como de la Embajada española en Kinshasa, que ayer estuvo cerrada al público por motivos de seguridad.
