AMÁN, 16 May. (Reuters/EP) -
Los rebeldes sirios han lanzado este jueves una ofensiva contra una importante base militar en el sur de Siria y contra varios puestos de control en la ciudad de Deraa, una operación destinada a intentar recuperar terreno frente a las fuerzas del régimen que preside Bashar al Assad en la zona más próxima a la frontera con Jordania.
Esta ofensiva de los rebeldes ha llegado después de que la semana pasada se vieran obligadas a adoptar posiciones defensivas cuando las fuerzas del régimen recuperaron el control de la localidad de Jirbet Ghazalé, por la que pasa la principal autovía que une Damasco con la frontera con Jordania.
Los rebeldes han dicho que cientos de combatientes armados con lanzamisiles antiaéreos se han desplegado para intentar asaltar el cuartel de la Brigada Mecanizada 52 del Ejército sirio, una de las mayores bases militares del país, situada en la provincia de Deraa.
La base, emplazada a unos 80 kilómetros al sur de Damasco, está en el centro de una zona muy protegida que, desde el inicio del conflicto, a mediados de marzo de 2011, ha supuesto el extremo meridional de defensa en torno a la capital.
Desde el comienzo de la revuelta contra Al Assad, este acuartelamiento ha sido reforzado con artillería y carros de combate. Los rebeldes mantienen que esta base militar ha sido empleada para atacar las localidades que controlan los sublevados cerca de la frontera con Jordania.
"Esta batalla ha sido una respuesta al ataque contra Jirbet Ghazalé de las fuerzas del régimen, para abrir un nuevo frente e impedir cualquier avance", ha explicado a Reuters Faew Aboud, un portavoz del batallón Moatasem B'Alá, que forma parte de la brigada Faluya Hauran, que forma parte de la ofensiva.
La llanura de Hauran, que llega hasta los Altos del Golán, ocupados por Israel, es el lugar en el que comenzó la revuelta contra el régimen de Bashar al Assad a mediados de 2011.
La base de la Brigada Mecanizada 52 del Ejército sirio, situada a las afueras de la localidad de Herak, ha aguantado varias ofensivas lanzadas anteriormente por los rebeldes, que ahora aseguran que esta operación es la mayor que han realizado en los últimos meses.
"Cuando ampliamos la lucha contra ellos, debilitamos las capacidades de las fuerzas del régimen", ha explicado Abú Thaer, un combatiente de la brigada rebelde Liwa al Tawheed. Thaer ha indicado que dos de los principales puestos de control situados en el casco antiguo de Deraa también han sido atacados por los sublevados.
Las fuerzas opositoras tienen el control de amplias zonas del norte y el este del país pero las fuerzas de Al Assad han lanzado ofensivas en Damasco, Homs y Deraa para intentar consolidar sus posiciones.
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una organización con sede en Londres y con una amplia red de informadores en territorio sirio, el conflicto en Siria ha acabado con la vida de más de 90.000 personas.
