R.Unido.- El ex ministro Charles Clarke pone en duda la credibilidad y el liderazgo de Tony Blair

Actualizado: martes, 27 junio 2006 13:28

El ex ministro del Interior fue cesado de su puesto tras un escándalo en su ministerio sobre deportaciones

LONDRES, 27 Jun. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Marta Altuna) -

El ex ministro del Interior británico Charles Clarke mostró hoy su malestar tras haber sido cesado de su puesto y consideró que el primer ministro británico, Tony Blair, ha perdido su credibilidad y su autoridad con su partido. Asimismo, en declaraciones que recoge hoy la prensa británica, criticó a su sucesor, John Reid, por haber dicho que el ministerio no funcionaba como debía.

Clarke fue obligado a abandonar su cargo el pasado mes de mayo después de que se conociera que 1.023 presos extranjeros fueron puestos en libertad tras haber cumplido su condena sin que se hubiera considerado su deportación.

El ex ministro dice ahora que habla para restaurar su reputación política tras su retirada y para que se oiga su opinión sobre este asunto. Sobre la fecha en la que Blair dejará su puesto, dijo que cree que el primer ministro se retirará a finales de 2008.

"La mejor opción para Tony sería recuperar su liderazgo y su autoridad para que pueda seguir un periodo más de tiempo". "Si lo puede hacer o no, ya que ha habido asuntos recientes que le han dañado mucho, ya es algo que no sé y que no es de mi incumbencia", agregó.

"Lo que hago simplemente es observar que existen muchas dudas sobre esto y son dudas que yo comparto, esta es la verdad", dijo Clarke ante las críticas que ha recibido el Gobierno de Blair. Las críticas se centran sobre todo en el mal funcionamiento del poder judicial y de los sistemas públicos de sanidad y educación.

MALESTAR

Respecto a su destititución, dijo que la decisión de Blair se debió a asuntos políticos en lugar de a su intención de realizar reformas a largo plazo y explicó que la actuación del primer ministro supone que no se podrán realizar los cambios planeados para que hubiera una transformación de su Ministerio.

El ex ministro dijo que Blair le ofreció otros puestos de trabajo, que fueron rechazados porque lo que quería era haber resuelto los problemas del Ministerio del Interior. Preguntado sobre si se sintió enfadado por su destitución respondió: "Me sentí enfadado por la situación, no me sentí enfadado particularmente con él, aunque creo que tomó una decisión equivocada".

"Me sentí enfadado y frustrado porque creo que esta era una tarea muy grande, un gran privilegio que se me pidiera que fuera ministro del Interior en las elecciones generales y era algo que debía suceder durante un periodo de tres o cuatro años y yo creía que lo podía hacer", declaró.

Por su parte, el secretario de Estado de Eduación, Jim Knight, se refirió a las declaraciones del ex ministro del Interior y dijo que la actitud de Clarke "no está haciendo ningún favor" al partido laborista.