LONDRES, 10 Ene. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Marta Altuna) -
El Gobierno británico abrirá una investigación para esclarecer las circunstancias que permitieron que británicos que habían sido condenados en el extranjero por asesinato, violación o abuso de menores, pudieran trabajar en Reino Unido en puestos en los que estaban en contacto con niños.
La Policía dio a conocer que se ha permitido que estos criminales puedan trabajar con personas vulnerables. La secretaria de Estado del Ministerio del Interior, Joan Ryan, dijo que la Policía todavía está registrando las ofensas por las que fueron condenados.
La prensa británica indica hoy que 525 personas condenadas en el extranjero han pedido trabajo en Reino Unido. La Asociación de Policía APCO explicó que no fueron revisados en el Ministerio del Interior 27.529 casos, entre ellos 25 británicos condenados por violación. La asociación señaló que estos nombres debían de haber entrado en los ficheros de la Policía nacional.
Ryan dijo que los oficiales que trabajan actualmente en el Ministerio del Interior no conocían que no se habían registrado algunos documentos enviados del extranjero. Los casos denunciados incluyen 25 violaciones, tres intentos de violación, 29 condenas por pederastia, 17 casos de abusos deshonestos, cinco asesinatos, 9 intentos de asesinatos, 13 condenas por homicidio y 29 robos.
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