LONDRES 23 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Marta Altuna) -
El número de personas que solicitaron la ciudadanía británica en el año 2005 se incrementó en un 64 por ciento respecto al año anterior, mientras que las peticiones de asilo subieron un 5 por ciento, según las cifras dadas a conocer hoy por el Ministerio de Interior británico.
Una de las causas de este gran incremento es que los inmigrantes presentaron sus peticiones antes de que se introdujera un exámen sobre las costumbres de los británicoas, que en la actualidad es obligatorio para pedir la ciudadanía.
El pasado año, 217.475 personas pidieron la ciudadanía, pero según el Gobierno, ésta fue concedida sólo en 161.780 de los casos. El examen que deben pasar estas personas contiene preguntas sobre la historia británica, costumbres y leyes, así como conocimientos prácticos como por ejemplo los números de los servicios de emergencia.
El Gobierno de Tony Blair está reformando los procesos de ciudadanía para tratar de reforzar la unidad nacional. Ahora, los nuevos ciudadanos británicos asisten a ceremonias en las que prometen servir a la reina Isabel II y a los valores británicos.
La mayoría de los nuevos inmigrantes llegan de los países del este de Europa que accedieron a la Unión Europea en mayo de 2004. Las cifras gubernamentales señalaron que 392.000 personas provenían de este países. Reino Unido, Irlanda y Suecia no fijaron ninguna restricción a los ciudadanos de los diez nuevos miembros que entraron en la UE en 2004 para que trabajaran en su territorio --España levantó esta prohibición el 1 de mayo pasado--.
El secretario de Inmigración británico, Liam Byrne, indicó que los inmigrantes continúan llegando a Reino Unido y que pueden ayudar a cubrir puestos de trabajo "en particular en la construcción, la agricultura, la restauración y la industria alimentaria". Además, señaló que "tienen un efecto positivo en la economía británica".