MOSCÚ 27 Ene. (Reuters/EP) -
El primer ministro ruso, Dimitri Medvedev, ha advertido al presidente sirio, Bashar al Assad, de que sus posibilidades de seguir en el poder son menores cada día, aunque ha insistido en que la solución para el conflicto sirio pasa por el diálogo entre las partes.
"Creo que cada día, cada semana, cada mes las opciones de que siga son cada vez menores, pero lo vuelvo a repetir, quien decide debe ser el pueblo sirio. No Rusia, Estados Unidos ni ningún otro país", ha afirmado Medvedev en una entrevista concedida a la cadena de televisión CNN y cuya transcripción ha sido difundida por la oficina del primer ministro.
"La función de Estados Unidos, los europeos y de las potencias regionales (...) es sentar a las partes a negociar y no sólo pedir la dimisión de Al Assad para que luego sea ejecutado como (el exlíder libio, Muamar) Gadafi o llevado a juicio en camilla como Hosni Mubarak", ha argumentado.
Rusia ha sido el principal soporte a nivel internacional del régimen del presidente Al Assad, pero estas son las declaraciones más duras contra el mandatario sirio desde que comenzaran las protestas, en marzo de 2011, que han derivado en una cruenta guerra civil que ha costado más de 60.000 vidas.