MADRID, 25 (EUROPA PRESS)
El Ministerio de Defensa de Rusia ha desplegado en el noreste de Siria a unos 300 policías militares procedentes de la república rusa de Chechenia para facilitar la retirada de los milicianos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), según ha informado la agencia de noticias rusa Sputnik.
En un comunicado, el departamento que dirige el general Sergei Shoigu ha explicado que se ha enviado a Siria a "unos 300 soldados de la Policía Militar de las Fuerzas Armadas de Rusia estacionados en la república de Chechenia" para que realicen "tareas especiales" en territorio sirio.
Los policías militares rusos "ayudarán a garantizar la seguridad de la población y a mantener el orden" en la zona, además de "patrullar las áreas designadas" y contribuir a la retirada de "unidades de autodefensa kurdas y sus armamentos a una distancia de 30 kilómetros" de la frontera con Turquía.
El Ministerio de Defensa ruso ha dicho que también ha enviado más de 20 vehículos blindados militares que llegarán próximamente a la base aérea de Hmeimim.
El despliegue de estos agentes de la Policía Militar rusa se enmarca en el acuerdo alcanzado este martes por el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, con su homólogo ruso, Vladimir Putin, para que los milicianos de las FDS, lideradas por los combatientes kurdos sirios de las Unidades de Protección Popular (YPG) se replieguen del noreste de Siria.
Turquía puso en marcha el 9 de octubre la operación Manatial de Paz para expulsar a los milicianos de las YPG del noreste de Siria y crear en la región una zona segura en la que reubicar a más de un millón de refugiados. Finalmente, tras el acuerdo con Rusia, serán las fuerzas del régimen sirio, con apoyo de la Policía Militar rusa, las responsables de garantizar el repliegue de combatientes kurdos sirios.
El jueves, un responsable del Ministerio de Defensa ruso explicó a Sputnik que la previsión es desplegar 276 policías militares rusos para realizar patrullas en suelo sirio.
Turquía comenzó el 9 de octubre su operación Manantial de Paz en el noreste de Siria con el objetivo de expulsar a las milicias kurdas de su frontera y delimitar una "zona segura" para acoger a miles de refugiados sirios que permanecen en su territorio.
Días después, Turquía acordó con Estados Unidos un alto el fuego en la región para permitir la retirada de los milicianos de las Fuerzas Democráticas Sirias y el 22 de octubre el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, pactó con su homólogo ruso, Vladimir Putin, un alto el fuego que contempla que las fuerzas del régimen sirio se desplegarán en el noreste de Siria apoyadas por policías militares rusos para garantizar la salida de los combatientes kurdos sirios.
