Rusia.- El ex espía ruso implica a Putin en su envenenamiento, en una declaración póstuma

Actualizado: viernes, 24 noviembre 2006 15:00

LONDRES, 24 Nov. (EP/AP) -

El ex espía ruso Alexander Litvinenko, que falleció anoche tras ser envenenado, ha acusado de su enfermedad al presidente ruso, Vladimir Putin, en una declaración firmada y leída tras su muerte, según informaron hoy fuentes próximas al ex agente.

La declaración, leída a los periodistas en el exterior del hospital donde Litvinenko murió a última hora de ayer, acusó al presidente ruso de no tener "ningún respeto por la vida, la libertad ni ningún valor civilizado". "Has mostrado tú mismo ser indigno de tu puesto, ser indigno de la confianza de los hombres y las mujeres civilizados", denunció Litvinenko, según la carta leída por su amigo, Alex Goldfarb.

"Puedes conseguir silenciar a un hombre, pero los aullidos de protestas alrededor de todo el mundo resonarán, señor Putin, en tus orejas durante el resto de tus vidas", agregó. Goldfarb explicó que Litvinengko le dictó la carta antes de perder la conciencia el pasado martes, y después la firmó en presencia de su esposa, Marina.

El Gobierno de Putin ha negado firmemente su implicación en el envenenamiento. "Las acusaciones contra Rusia a este respecto son sólo un sinsentido", aseguró un portavoz del Kremlin, Dimitry Peskov, antes de que se conociera el comunicado del ex espía.

"Es tan estúpido e increíble que no merece la pena comentarlo", agregó Peskov en Finlandia, donde Putin asiste a una cumbre con líderes de la Unión Europea. "Ahora, el caso será investigado por los servicios británicos pertinentes y esperamos que aquellos que están detrás del caso serán llevados ante la justicia", añadió.

Litvinenko, férreo crítico con el Gobierno ruso, sufrió un fallo cardíaco a última hora de ayer después de estar varios días en los cuidados intensivos del Hospital Universitario de Londres. Los médicos no han dado con la causa de la enfermedad del ex agente secreto, aunque todo apunta a un envenenamiento.

Mientras, otro amigo, Andrei Nekrasov, que habló con Litvinenko poco antes de que perdiera la conciencia, aseguró que acusó a los servicios de inteligencia rusos de envenenarlo. Sus allegados aseguraron que el ex agente ha estado en búsqueda por desvelar casos de corrupción en el Servicio de Seguridad Federal de Rusia (FSB), así como por intentar desenmascarar a los asesinos de otra crítica con el Gobierno de Putin, la periodista Anna Politkovskaya.

"Estaba completamente convencdio de que fue el FSB. No había duda en su mente de quién fue", aseguró Nekrasov . "Los bastardos me cogieron, pero no cogerán a todos", dijo el ex agente a su amigo, quien relató que su padre, su mujer y su hijo de diez años se encontraban a su lado cuando murió.

Litvinenko aseguró a la Policía que creía que había sido envenenado el pasado 1 de noviembre, mientras investigaba el asesinato de Politkovskaya. Ese mismo día comenzó a encontrarse mal tras una reunión secreta con dos contactos rusos, que tuvo lugar después de una cena en un restaurante japonés con Mario Scaramella, un experto en seguridad.

Según afirmó Scaramella se había reunido con Litvinenko para enseñarle algunos correos electrónicos en los que se identificaba a los asesinos de la periodista Anna Politkovskaya. Agregó que en los los citados documentos se nombraba a otras personas, potenciales objetivos para ser asesinadas, entre las que se encontraba Litvinenko.