MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
El embajador ruso en España, Alexander Kuznetsov, criticó hoy el "doble rasero" que ha primado en la decisión de la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (ODIHR) de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) de no enviar observadores a las elecciones parlamentarias del próximo 2 de diciembre en Rusia, asegurando que Moscú lo único que ha hecho ha sido "cumplir con sus compromisos políticos" con la organización que durante 2007 preside España.
Según explicó en declaraciones a Europa Press, Rusia cumplió con su compromiso como país miembro de la OSCE e invitó a los observadores de ésta a las elecciones. Pero, pese a que ODIHR intentó fijar "sus propios principios de actuación" e imponer el número y el momento de su llegada a Rusia. Finalmente, y tras poner Moscú sus "condiciones" se llegó a un acuerdo sobre la misión de observación.
Sin embargo, indicó el embajador, el director de la ODIHR viajó a Washington y a su regreso anunció que la oficina "renuncia a participar en las elecciones". En este sentido, Kuznetsov dijo que su intención no era "hacer ninguna insinuación pero los hechos son así". "Prefirieron armar un escándalo" en lugar de enviar los observadores, lamentó.
Además, tras la conversación telefónica que mantuvo el ministro de Exteriores y presidente de turno de la OSCE, Miguel Angel Moratinos, con su homólogo ruso, Sergei Lavrov, a raíz de la decisión de la ODIHR, quedó de manifiesto que ésta aparentemente "no consultó a la presidencia española y se colocó por encima de los Estados miembro".
Rusia, precisó, lleva "insistiendo desde hace tiempo en que el modo de trabajar de esta oficina debe ser más transparente y hemos propuesto unos principios básicos para que los criterios sean iguales para todos los países y no se aplique un doble rasero, con unos principios a los países al oeste de Viena y otros principios para los países al este". Actualmente, denunció, la actividad de la ODIHR se hace "en secreto" y "nadie sabe cómo actúa".
En cuanto a las críticas porque el Gobierno ruso sólo había invitado a 70 observadores de la ODIHR, Kutnetsov subrayó que Moscú invitó "esta vez a más observadores que otros países occidentales y Estados Unidos han invitado en situaciones similares, es decir, nosotros hemos cumplido los compromisos que existen en la OSCE". Asimismo, recordó que aunque no esté estos observadores sí habrá de otros organismos europeos como el Consejo de Europa que, dijo, "tendrán posibilidades de trabajar con toda normalidad".
REFORMA DE LA OSCE
Para el embajador ruso, el "problema de fondo" está en la propia OSCE. "Los sistemas políticos en los países europeos son muy distintos y tienen muchos matices, pero ¿quién determina quién tiene la democracia mejor o peor?", se preguntó, insistiendo en que Rusia quiere que "los mismos criterios se apliquen a todos los países".
Por ello, indicó que este será precisamente uno de los temas a tratar en la cumbre de la OSCE de la próxima semana en Madrid para la que en principio está prevista la asistencia del ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov. Para Rusia, "la OSCE está frente a una elección muy importante, o se convierte en una organización internacional verdadera, con la igualdad para todos los países, o continúa esta situación extraña actual en la que se la utiliza a veces para la presión política de unos países contra otros".
"Si continúa esta situación yo me temo que esté condenada a la extinción", previno Kutnetsov, que sin embargo precisó que pese a todo Rusia no se plantea el abandonar la OSCE. Lo único que ha hecho Moscú, insistió, es "dejar constancia de una realidad, que esta organización tiene que reformarse y necesita mayor transparencia y criterios más claros".
