MOSCÚ 18 Dic. (EP/AP) -
El presidente sirio, Bachar el Assad tenía previsto reunirse hoy y mañana en Moscú con su homólogo ruso, Vladimir Putin, además de con otros funcionarios del Kremlin, para tratar la situación en Oriente Próximo e Irak y dar un impulso, asimismo, a las relaciones bilaterales.
Así, Assad y Putin esperan debatir los últimos episodios de violencia desatados en Oriente Próximo y el recién inagurado alto el fuego en la franja de Gaza, acontecimientos "que crean seria preocupación", aseguró un funcionario del Kremlin.
Además de vías para minar las tensiones entre facciones palestinas rivales --próximas a los partidos del primer ministro, Ismael Haniyeh, y del presidente Mahmud Abbas--, se tratará el bloqueo para formar un Gobierno nacional palestino así como la necesidad de impulsar de nuevo el proceso de paz con la colaboración de Siria e Israel, según admitió un funcionario del Kremlin bajo condición de anonimato, e incidió en que Irák estará también sobre la mesa de debate.
Ambos mandatarios asimismo intentarán dar un impulso a las relaciones económicas y políticas, después de que, en 2005, Moscú acordara cancelar casi tres cuartas parte de la deuda de Siria, unos 13.000 millones de dólares (10.400 millones de euros), para impulsar las relaciones económicas entre ambos países.
Por su parte, Rusia ha sido desde hace años uno de los principales suministradores de armas a Siria, algo muy criticado por Israel, quien alega que estas armas han sido redistribuidas por Siria a la guerrilla chií libanesa de Hezbolá, algo que Moscú rechaza.