MADRID, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las milicias suníes salafistas y chiíes huthis han reanudado los enfrentamientos armados en la localidad de Damaj, en la región de Saada (norte de Yemen), pocas horas después de la tregua que habían acordado este lunes después de casi una semana de combates que han causado alrededor de un centenar de muertos, según han informado fuentes humanitarias.
El alto el fuego había sido anunciado ayer lunes por el enviado especial de la ONU en Yemen, Jamal Benomar --citado por la agencia estatal de noticias SABA--, pero duró apenas unas pocas horas, el tiempo necesario para que una delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) entrase en Damaj para intentar evacuar a 23 heridos graves.
En la ciudad permanecen alrededor de 200 civiles necesitados de atención médica y que no pueden escapar a causa de los enfrentamientos, según han indicado las fuentes humanitarias, citadas por la agencia misionera de noticias MISNA.
Según los salafistas, los combates comenzaron el pasado 30 de octubre después de que los huthis atacaran Damaj, una localidad dominada por los radicales suníes situada a unos 40 kilómetros de la frontera con Arabia Saudí.
Por su parte, los huthis (una minoría chií zaidí que recibe el nombre de su líder, Abdel Malek al Huthi) han responsabilizado a los salafistas del brote de la violencia por haber trasladado a miles de combatientes extranjeros a Damaj. Sin embargo, los salafistas aseguran que los extranjeros sólo han viajado a Damaj para estudiar teología islámica en la academia de Dar al Hadith, establecida en los años ochenta.
Un portavoz suní aseguró ayer lunes que los enfrentamientos ya habían causado alrededor de un centenar de muertos, en su mayoría salafistas y entre los cuales figurarían algunos 'muyahidines' extranjeros: un ciudadano canadiense, varios europeos (cuyas nacionalidades no se precisan), tres argelinos, un emiratí y dos indonesios. Los huthis no han informado de bajas y las autoridades no se han pronunciado de momento.
El jefe de la comisión presidencial encargada de intentar acabar con los combates, Yehia Abuesbaa, denunció el pasado domingo que los milicianos huthis habían incumplido su compromiso de suspender los ataques a cambio de la liberación de seis partidarios suyos que estaban en poder del clan salafí Al Ahmar en la adyacente provincia de Omran.