Serbia.-El Tribunal Supremo serbio ordena un nuevo juicio contra 14 paramilitares serbios por la muerte de 200 croatas

Actualizado: jueves, 14 diciembre 2006 18:50

BELGRADO, 14 Dic. (EP/AP) -

El Tribunal Supremo de Serbia ordenó hoy la celebración de un nuevo juicio contra 14 paramilitares serbios hallados culpables de la muerte de 200 soldados y civiles croatas, capturados y asesinados durante la guerra de independencia que Croacia libró en 1991.

En este sentido, el Tribunal citó "importantes grietas" en la ley criminal aplicada durante los procesos judiciales contra los paramilitares serbios a principios de año y exigió la celebración de nuevas audiencias para 13 hombres y la única mujer paramilitar condenados a hasta 20 años de cárcel por las ejecuciones que supuestamente llevaron a cabo contra croatas en una granja próxima a Vukovar, en el este de Croacia.

Por su parte, tres oficiales del Ejército yugoslavo están acusados por este caso y se enfrentan a un juicio en el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY), de Naciones Unidas y con sede en La Haya, que juzga los grandes crímenes de guerra.

La decisión del Tribunal Supremo, que no reveló detalles sobre estas grietas en la ley, ha sido contestada por el portavoz de los fiscales serbios, Bruno Vekaric, cuyo colectivo se mostró "sorprendido de forma no grata por la decisión del Tribunal Supremo". "Alguien mató a aquellas personas inocentes y creíamos haber probado quien lo hizo", aseguró.

En noviembre de 1991, el Ejército yugoslavo, controlado por los serbios, avanzó contra las tropas de la recién independiente Croacia y se hizo con el control del territorio disputado en el este del país, capturando a varios cientos de soldados y civiles croatas.

Mientras que la mayoría de los capturados en la ciudad de Vukovar fueron eventualmente liberados, 200 fueron evacuados de un hospital poco después de su secuestro y, supuestamente, fueron abatidos en una granja porcina en el barrio próximo de Ovcara.

Los soldados croatas fueron separados en grupos de siete y ocho personas y abatidos, según el veredicto anterior emitido por el Tribunal Superior serbio. Algunos con signos de estar con vida recibieron, incluso, un tiro de gracia a bocajarro para acabar con su vida.