MOGADISCIO 22 Nov. (EP/AP) -
La Unión de Tribunales Islámicos aseguró hoy que garantizará la seguridad de los trabajadores humanitarios que acudan en respuesta a la catástrofe provocada por las inundaciones en Somalia.
Los Tribunales Islámicos, que mantienen el control de gran parte del sur del país desde el pasado junio, indicaron que el país necesita más ayuda para responder a las inundaciones, que han provocado la muerte de al menos 150 personas en Somalia, Kenia y Etiopía.
"El problema de las inundaciones en Somalia es mayor de lo que podemos afrontar solos", señaló un portavoz del comité de ayuda por las inundaciones de la Unión de Tribunales, el jeque Nor Barud. Aseguró que su grupo protegerá a los trabajadores humanitarios en las zonas que estén bajo su control. Hasta ahora, las organizaciones humanitarias están entregando ayuda vía aérea en Somalia y otras partes del este de Africa, pero, tras años de anarquía completa, el sistema de carreteras del país es prácticamente intransitable.
Somalia no ha tenido un Gobierno efectivo desde 1991, cuando señores de la guerra derrocaron a un dictador y llevaron al poder a otro. El actual Gobierno, que tiene su sede en Baidoa, fue formado con la ayuda de la ONU hace dos años, pero hasta ahora no ha logrado obtener un control real fuera de la ciudad en la que está asentado. El jefe de la delegación de la Cruz Roja para Somalia, Pascal Hundt, dio la bienvenida a las declaraciones de los Tribunales Islámicos, aunque dijo que su organización continuará trabajando como lo está haciendo hasta ahora.