MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Sudán se ha comprometido a cortar todos sus lazos militares y comerciales con Corea del Norte, según ha anunciado este jueves el Departamento de Estado de Estados Unidos, en medio de las presiones de Washington contra Pyongyang.
"Hoy (por el jueves), durante un encuentro bilateral en Jartum con el vicesecretario de Estado (John) Sullivan, el Ministerio de Exteriores sudanés ha anunciado formalmente el compromiso de Sudán con cortar todos los lazos comerciales y militares con Corea del Norte", ha dicho la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert.
"Estados Unidos aplaude el compromiso del Gobierno de Sudán y seguirá manteniendo su gestión en este asunto para garantizar que el compromiso es cumplido en su totalidad", ha agregado en su comunicado.
En el mismo, ha recalcado que "aislar al régimen de Corea del Norte es una de las principales prioridades de Estados Unidos y un elemento clave para mantener la paz y la estabilidad en el mundo".
Así, Nauert ha manifestado que "Estados Unidos agradece el compromiso de Sudán a la hora de adoptar estas medidas importantes, ante la gran amenaza que supone Corea del Norte".
El Gobierno de Estados Unidos levantó a principios de octubre las sanciones contra Sudán debido a lo que Washington considera claros avances del país africano contra el terrorismo y a su compromiso de no firmar contratos armamentísticos con Corea del Norte.
En un movimiento que completó un proceso iniciado por el expresidente estadounidense Barack Obama, el actual mandatario, Donald Trump, eliminó varias sanciones económicas que excluían a Sudán del sistema financiero mundial, así como el embargo comercial que Estados Unidos mantenía sobre el país.
La comunidad internacional sospecha que Sudán habría mantenido, al menos en el pasado, vínculos militares con Corea del Norte, actualmente en un tenso enfrentamiento con Estados Unidos debido a las pruebas y maniobras militares de ambos.
Sin embargo, Sudán sí permanece en la lista estadounidense de Estados que financian el terrorismo junto con Irán y Siria, hecho que prohíbe la venta de armas de Estados Unidos al país y restringe la ayuda estadounidense.
Estados Unidos considera que Sudán ha avanzado suficientemente en el cumplimiento de sus demandas en lo que se refiere a combatir el terrorismo, resolver conflictos internos y permitir más ayuda humanitaria en Darfur y otras zonas rebeldes fronterizas.
La comunidad internacional y los grupos de Derechos Humanos, sin embargo, consideran prematura la eliminación de las sanciones y no se han mostrado favorables a este gesto con el Gobierno de Omar Hasán al Bashir, acusado por el Tribunal Penal Internacional (TPI) por crímenes de lesa humanidad y genocidio en Darfur entre 2003 y 2006, hechos por los que el país también tiene sanciones vigentes.
