EL CAIRO 17 Ago. (EP/AP) -
La misión de paz de la Unión Africana (UA) no ha logrado devolver la calma y la seguridad a la región occidental sudanesa de Darfur, sino que de hecho, la situación se encuentra en su peor momento desde que se firmó el acuerdo de paz entre Gobierno y parte de los rebeldes el 5 de mayo, según denunció hoy Amnistía Internacional (AI), al tiempo que el Consejo de Seguridad de la ONU discute la manera de reemplazar a la misión de la UA por una fuerza de la ONU que sea más efectiva, algo a lo que Jartum se muestra reticente.
"Una vez más el mundo entero está ignorando el conflicto en Darfur, siguiendo la corriente a las farsas de que la paz está progresando, cuando, de hecho, nada está más lejos de la realidad", aseguró la vicesecretaria general de AI, Kate Gilmore a través de un comunicado.
Desde que se firmó el acuerdo y según datos de AI hay más desplazados y más violaciones de los Derechos Humanos, con lo que confirma las últimas denuncias de las agencias de la ONU y ONG de ayuda internacional, que han asegurado que en muchos puntos les es imposible desplazar la ayuda o trabajar debido a la inseguridad y los enfrentamientos.
Existe además un "verdadero y real peligro" de que el conflicto sobrepase fronteras, advirtió AI, añadiendo que sus investigadores han encontrado evidencias de que el Gobierno de Sudán está violando la prohibición del Consejo de Seguridad de realizar vuelos militares y bombardear áreas bajo control rebelde.
El tratado de paz firmado entre el Ejecutivo sudanés y el principal líder rebelde, Mini Minnawi, quien encabeza el Movimiento de Liberación de Sudán, fue presentado como el fin del conflicto que se ha cobrado más de 200.000 vidas en la región desde 2003, cuando tribus africanas se revelaron contra el Gobierno árabe de Jartum.
La revuelta provocó masivas represalias llevadas a cabo por las milicias progubernamentales, conocidas como 'Janjaweed', y más de dos millones de personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares a causa de los combates.
Amnistía dijo que las ciudades y campos de refugiados en el Darfur Occidental aún permanece bajo control de los Janjaweed en su mayoría. Además, culpó de la violencia más reciente a las luchas internas entre los grupos rebeldes que quedaron fuera del acuerdo de paz y permanecen activos.
No sólo los que no firmaron llevan a cabo actos violentos, advierte AI, que aseguró que, en una redada a mediados de julio, el grupo de Minnawi, quien ha sido nombrado ayudante del presidente, Omar Bashir, mató a 72 personas de facciones opuestas al tratado de paz.