LONDRES 8 May. (EUROPA PRESS) -
El subsecretario de la ONU para Asuntos Humanitarios, Jan Egeland, que llegó ayer a la región occidental sudanesa de Darfur, tuvo que se evacuado hoy de un campo de desplazados, junto con los trabajadores y periodistas que le acompañaban, debido a que una manifestación de protesta se volvió violenta.
Según la BBC, los habitantes del campo empezaron a manifestarse para reclamar la presencia de tropas extranjeras para proteger los campos de desplazados, y una mujer empezó a gritar diciendo que uno de los cooperantes era en realidad un miembro de las milicias árabes 'janjawid'.
A partir de ese momento, la manifestación degeneró en violencia y el enviado de la ONU y su comitiva tuvieron que abandonar el lugar, Un vehículo de la ONU fue atacado con hachas y piedras.
La guerra de Darfur, que comenzó en febrero de 2003, ha causado el desplazamiento unos dos millnones de personas, de los que alrededor de 200.000 están refugiados en el vecino Chad.