JARTUM 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno sudanés no aceptará la presencia de personal europeo dentro de la fuerza híbrida ONU-UA --denominada UNAMID-- que se desplegará en Darfur el próximo 31 de diciembre, afirmó el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Ali al Sadig, en declaraciones recogidas ayer por el periódico 'Sudan Tribune'.
"Cualquier equipo técnico incluido dentro del acuerdo se supone que procede de China y Pakistán", aseguró Al Sadig en referencia a la resolución 1769 del Consejo de Seguridad. Ésta establece que una fuerza compuesta por personal de la ONU y de la Unión Africana debe sustituir en la inestable región de Darfur a la Misión de la Unión Africana en Sudán (AMIS).
Al Sadig también dijo que algunos miembros de la ONU quieren permitir que ciertos países, especialmente de Europa, envíen sus tropas, ante lo cual señaló que el despliegue de cualquier contingente procedente de países no citados en el acuerdo "no es asunto de preocupación para Sudán".
Sudán aún tiene que aprobar la lista de países que podrán ofrecer tropas a la misión conjunta. La resolución de la ONU habla, a petición del país africano, de una fuerza "de carácter predominantemente africano", aunque matiza que debe poder "llevar a cabo efectivamente el mandato" que establece la resolución.
Aunque el 90 por ciento de las fuerzas de tierra y el 75 por ciento del total proceden de países africanos, fuentes diplomáticas indicaron que Sudán aún no ha aprobado el envío de tropas tailandesas, nepalíes y noruegas.
El jefe de la Secretaría de Paz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Sirag Al Deen Hamid, declaró al estatal Centro Sudanés de Medios de Comunicación que si los países africanos no pueden ofrecer las tropas que se necesitan para la misión, entonces Jartum tiene derecho a reclutar efectivos de fuentes árabes e islámicas.