NAIROBI 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un misión de paz mucho mayor y el establecimiento de sanciones correspondientes son medidas necesarias para reducir la violencia y estabilizar la región sudanesa de Darfur, según estimó el representante de la ONU para Sudán, Jan Pronk ante el Consejo de Seguridad.
Al menos una vez al mes, la milicia formada por grupos de entre 500 y 1.000 personas ataca pequeñas localidades, y asesina a decenas de personas, según Pronk. Sólo la seguridad internacional garantizada por organismos como la Unión Africana o la ONU puede ayudar, según explicó, añadiendo que debe ser mucho mayor que la existente en la actualidad, según cita la agencia de noticias de la ONU, IRIN.
Sobre esta fuerza de paz, Pronk pidió que sea "fuerte, capaz de defenderse de detener ataques sobre civiles, de desarmar milicias y rebeldes, que deberían haber sido ya despojados de las armas por el propio Gobierno de Sudán", sentenció.
Los que perpetraron ataques a gran escala durante los años 2003 y 2004 han mejorado sus objetivos, muchas zonas de Darfur han sido "barridas" y millones de aldeanos refugiados en campo tienen demasiado miedo para regresar a sus hogares mientras continúe el terror, aseguró el enviado de la ONU.
Además y como complemento, una misión de paz fuerte debe ser complementada con sanciones sobre los movimientos de tropas que no encajen en el acuerdo de paz, los envíos de armas y aquellos que cometen abusos o atrocidades.
Estas sanciones debe tener como objetivo a "mandos y líderes políticos responsables de la carnicería de 2003 y 2004, así como lo que se han negado a detener las atrocidades en 2005", pidió Pronk.
En este sentido el enviado especial de la ONU a las conversaciones de paz sobre Darfur Salim Ahmed Salim, expresó su rechazo a la falta de progreso en las negociaciones que se celebran en la capital de Nigeria, Abuja.
"Las negociaciones se han caracterizado por un nivel inaceptable de inflexibilidad en las posiciones de las partes suspicacias, ausencia del mínimo de confianza y profunda desconfianza", aseguró.
Según Pronk, la impresión de estos resultados es que ambas partes han perdido la sensación de urgencia para la resolución del problema y no se preocupan de las fechas límite.