Dos de los mineros rescatados dudan de que sus compañeros sigan vivos
TEGUCIGALPA, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades hondureñas y los servicios de rescate que trabajan en la búsqueda de los ocho mineros que desde el pasado miércoles están atrapados en el interior de una minal ilegal de oro han tenido que suspender este sábado por la tarde las operaciones ante los derrumbes de tierra en la zona, lo que reduce las ya de por sí escasas esperanzas de encontrarles con vida.
Así las cosas, han acordado que a las 7:00 horas locales de este domingo se retomará la búsqueda de los ocho mineros que siguen bajo tierra desde que se produjo el derrumbe en la mina de oro de San Juan Arriba, en El Corpus, en el sur de Honduras, después de que el viernes fueran rescatados con vida sus otros tres compañeros.
Según ha explicado el director de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Moisés Alvarado, los equipos de rescate están haciendo lo que humana y profesionalmente se puede hacer en un trabajo ya que se trata de un trabajo "muy complicado".
El objetivo sigue siendo "rescatar" a los ocho mineros pero "sin poner en riesgo la vida" de los que intentan hacerlo, ha subrayado, en declaraciones recogidas por 'Proceso'. Así las cosas, este sábado se procedió a apuntalar con madera el túnel de acceso a la mina con el fin de asegurar la entrada para seguir con las labores este domingo.
No obstante, las esperanzas de encontrar con vida a los ocho mineros restantes parecen desvanecerse. El propietario de la mina, Virgilio Gúnera, ha confiado en que se produzca "otro milagro como el que sucedió con los otros tres mineros que fueron rescatados con vida el viernes".
El relato que han hecho los tres mineros rescatados tampoco parece augurar un resultado positivo. Bayron Escalante, uno de ellos, ha relatado que tras el derrumbe pudieron escuchar a sus compañeros gritando y pidiendo auxilio.
"NO PUEDO ASEGURAR QUE ESTÉN VIVOS"
"Decían que ya no aguantaban el peso de las piedras que tenían encima, nos pedían ayuda, de ahí dejaron de quejarse", ha precisado, en declaraciones a 'El Tiempo'. "No puedo asegurar que estén vivos, porque el pozo donde ellos estaban fue soterrado por completo", ha añadido.
El relato de Bryan Maradiaga, que también está hospitalizado tras su rescate el viernes, es muy similar. "Pedían a gritos que los desenterraran, pero no teníamos otra opción. No podíamos hacer mucho porque era complicado llegar al lugar donde ellos estaban. Lamentablemente nosotros no pudimos ayudarles", ha lamentado.
"Yo digo que no están con vida. Mire cuánto tiempo ha pasado y no sabemos más de ellos. Yo estoy muy preocupado, quiero que se salven todos", ha añadido el joven, que ha precisado que tiene a "dos buenos amigos" entre los desaparecidos.
