BANGKOK, 7 Oct. (EP/AP) -
El ex ministro de Exteriores de los Jemeres rojos de Camboya expresó, a su llegada al aeropuerto de Tailandia, su temor ante la posibilidad de ser inculpado por Naciones Unidas por su presunta implicación en el genocidio de casi dos millones de personas durante el régimen del grupo comunista durante la década de los años 70, unos cargos que se apresuró a negar.
Ieng Sari, que tiene previsto tomar un avión con destino a Phnom Phen, en Camboya, afirmó no haber hecho "nada malo" y se describió como una "buena persona".
"Creo en las buenas acciones, y las he hecho para salvar las vidas de varias personas durante la época del régimen", afirmó. "Pero dejemos que el tribunal averigüe la verdad", concluyó. El ex ministro se encuentra ahora en Tailandia para recibir un examen cardiovascular.
Los líderes supervivientes de los Jemeres han proclamado su inocencia por los cargos del asesinato sistemático de más de 1.700.000 camboyanos desde 1975 a 1979. Su máximo responsable, Pol Pot, falleció en 1998, y su jefe militar, Ta Mok, murió en la cárcel en 2006.
La creencia general es que Sary, cuya edad se cree es de 77 años, es el siguiente nombre en la lista de los acusados, a pesar de su estado de salud. "Mi corazón no funciona bien después de las últimas cirugías, y mi salud es mi principal preocupación ahora mismo", reconoció a su llegada al aeropuerto de Bangkok. Actualmente reside en Camboya.