ADDIS ABEBA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El ex dictador de Etiopía, Mengistu Haile Mariam, ha sido declarado culpable de genocidio y de otros cargos por un tribunal etíope que le ha juzgado 'in absentia' en un proceso que ha durado 12 años.
Se trata de uno de los pocos casos en que un dictador africano es juzgado en su propio país, pese a la incomparecencia de Mengistu, quien vive exiliado en Zimbabue bajo la protección del presidente de este país, Robert Mugabe.
El proceso contra el ex dictador comenzó tres años después de ser apartado del poder en 1991. Mengistu está acusado junto a otros 69 de sus antiguos colaboradores por su supuesta implicación en la muerte de cerca de 2.000 personas durante la llamada campaña del 'Terror Rojo', entre 1977 y 1978. Mengistu había accedido al poder en 1974, en un golpe de Estado militar contra el último emperador de Etiopía, Haile Selassie.
Algunos expertos aseguran que cerca de 150.000 estudiantes, intelectuales y políticos fueron asesinados durante el régimen comunista de Mengistu. No hay cifras exactas sobre los opositores muertos específicamente durante el 'Terror Rojo'.
Tras su derrocamiento en 1991 por los rebeldes liderados por Meles Zenawi --el actual primer ministro--, Mengistu buscó la protección de Mugabe. El juicio comenzó en 1994, y en todo este tiempo se vio complicado por las exigencias de las dos partes. Aparte, la muerte de cientos de testigos ha dificultado el trabajo de los fiscales y los abogados defensores.
Los tribunales etíopes ya han condenado a 1.018 personas desde 1994 por participar en el 'Terror Rojo'. Otras 6.426 siguen pendientes de juicio, pero más de 3.000 --incluido Mengistu-- viven en el exilio.
Un total de 106 altos responsables de su régimen han sido acusados de los mismos cargos contra Mengistu, de los cuales 43 ya han muerto y 26 han sido declarados culpables. El ex dictador y otros 32 dirigentes han sido juzgados 'in absentia' y otros 37 han comparecido ante los tribunales desde que comenzó el juicio, en 1994.