ANKARA, 1 Nov. (EP/AP) -
Un tribunal turco absolvió hoy a la arqueóloga de 90 años Muazzez Ilmiye Cig por asegurar que hace 5.000 años las sacerdotisas sumerias ya utilizaban velo, milenios antes de la aparición del Islam. Se trata del último juicios de opinión realizado en Turquía a pesar de las presiones de la UE en favor de las libertades en el país.
Cig fue acusada de insultar a los musulmanes bajo el auspicio del polémico artículo 301 del código penal, que prevé penas por insultar a la República de Turquía, a sus dirigentes o a su cultura y podría haber sido condenada hasta a 1 año de prisión.
Durante el juicio, que duró menos de una hora, Cig negó las acusaciones. "Yo soy una mujer de ciencia, nunca he insultado a nadie", aseguró.
El tribunal falló a su favor alegando que sus acciones no constituyen delito y también absolvió al editor de Cig, Ismet Ogutucu, de la editorial Kaynak. Activistas de grupos laicos asistieron al juicio como muestra de apoyo a la arqueóloga y aplaudieron al darse a conocer el veredicto.
El juicio tuvo su origen en las acusaciones de un abogado islamista que denunció las afirmaciones que realiza Cig en su último libro "Mis reacciones como ciudadana", en el que afirma que los ejemplos más tempranos de utilización de velo por las mujeres datan de la civilización sumeria, que tuvo su esplendor hacia el 3.000 a.C. Los velos eran utilizados entonces por sacerdotisas que educaban a los jóvenes en las relaciones sexuales.
Cig se dio a conocer tras escribir una carta a la mujer del primer ministro Recep Tayyipp Erdogan para pedirle que dejase de utilizar el velo como ejemplo para las mujeres del país, predominantemente musulmán.
Decenas de escritores, periodistas e investigadores han sido imputados en Turquía a causa de sus opiniones. Uno de los casos más llamativos fue el del último Nobel de la paz, Orhan Pamuk, que fue imputado por reivindicar el genocidio armenio.
