ESTAMBUL 22 May. (EP/AP) -
Un supuesto miembro sirio de Al Qaeda, Loa'i Mohammad Haj Bakr al-Saqa, fue expulsado hoy de una sala de un tribunal por llevar puesto un uniforme naranja, similar al de los presos de la cárcel de Guantánamo (Cuba), en aparente protesta.
Al Saqa, acusado de ser el cerebro de varios ataques, gritó "Dios es grande" a su llegada al tribunal. Las autoridades no le permitieron la entrada debido al uniforme naranja que llevaba, al considerar que podría entorpecer el procedimiento judicial. Al Saqa ya fue expulsado de un tribunal a principios de marzo por negarse a levantarse cuando el juez se lo pidió.
La Policía señaló que Al Saqa llevaba el uniforme debajo de su vestimenta normal y que cuando estaba siendo transferido al tribunal procedió a quitarse la ropa hasta quedarse con el uniforme. En Turquía, los prisioneros no llevan uniformes y pueden llevar vestimenta personal.
Al Saqa está siendo juzgado junto con 72 supuestos militantes de Al Qaeda por la serie de atentados suicidas que mataron a 58 personas en Estambul en noviembre de 2003. Según las autoridades turcas, Al Saqa preparaba un ataque con bomba a un crucero israelí.
El abogado de Al Saqa, Levent Dogus, reivindicó la inocencia del acusado alegando que no había cometido ningún crimen contra Turquía y rechazando las acusaciones de que planeó los atentados de Estambul. Los fiscales del caso han solicitado cadena perpetua para Al Saqa, al considerarlo un "alto cargo de Al Qaeda con una misión especial".
El abogado anterior de Al Saqa, Osman Karahan, que fue apartado del caso por dar dinero a uno de sus clientes, criticó al juez por no permitir que Al Saqa lleve el uniforme. "No existen restricciones que prohíban llevar ropa naranja en un tribunal", afirmó Karahan.