SILOPI (TURQUÍA), 20 (Reuters/EP)
Las autoridades turcas han dejado en libertad sin cargos a los 34 miembros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) que se habían entregado en señal de buena voluntad hacia el proceso reformista iniciado por el primer ministro del país, Recep Tayyip Erdogan.
Estos rebeldes habían llegado a la ciudad de Silopi (sureste del país), desde la vecina Irak. Los fiscales les interrogaron para luego proceder a su liberación, momento en que fueron recibidos por miles de seguidores que celebraron la decisión de las autoridades.
El ministro del Interior, Besir Atalay, ya ha mostrado su esperanza de que muchos miembros del PKK refugiados en el norte de Irak vuelvan a Turquía. De hecho, ha revelado que la vuelta de estos rebeldes forma parte de un amplio plan de reforma en virtud del cual volverán muchos más. "Esperamos que el grupo inicial que va a venir llegue a los 100-150 miembros. Estamos avanzando con un buen plan hacia una solución", señaló.
El líder del PKK, Abdulá Ocalan, encarcelado desde 1999, también ha expresado en varias ocasiones su apoyo a las reformas pretendidas por el Ejecutivo turco para reforzar los derechos de la minoría kurda.
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