VIENA, 14 Mar. (EP/AP) -
El presidente palestino, Mahmud Abbas, se reunió hoy con los jefes de Estado y de Gobierno de Austria, país que ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea (UE), para mantener conversaciones sobre la forma de que los 25 sigan prestando ayuda financiera al Gobierno palestino a pesar de la victoria de Hamás en las últimas elecciones parlamentarias.
Abbas se entrevistó en Viena con el canciller austríaco, Wolfgang Schuessel, y después debía hacerlo con otros líderes austríacos --como el presidente federal, Heinz Fischer-- antes de viajar a Estrasburgo (Francia) a última hora de hoy, donde conversará con altos funcionarios comunitarios.
En declaraciones a la prensa, Abbas instó a la UE a no cortar su ayuda, sugiriendo que esto podría interpretarse como un castigo para los votantes que eligieron a Hamás. "Uno no puede castigar a la gente hoy por escoger la senda democrática, por manifestar su elección", valoró.
Asimismo, aseguró que seguirá presionando al nuevo Gobierno palestino para que se adhiera a los acuerdos israelo-palestinos existentes y rechace la violencia, esfuerzos que hasta el momento no han tenido resultado alguno. "Habrá una ley, un Consejo Legislativo", afirmó, agregando que hablará con Hamás para encontrar "un punto de vista común".
La visita de Abbas se produce dos semanas después de que la ministra israelí de Asuntos Exteriores, Tzipi Livni, viajara a Europa para advertir a los líderes europeos del peligro que entraña financiar a un Gobierno palestino liderado por Hamás, que es considerado un grupo terrorista por Israel, pero también por Estados Unidos y la propia UE.
Ante la llegada de Abbas a Estrasburgo, el presidente del grupo del Partido Popular Europeo (PPE), Hans-Gert Poettering, propuso que la ayuda monetaria se canalice a través de Abbas o que se destine directamente a proyectos específicos, de forma que el dinero no termine directamente en manos de Hamás.
Al respecto, el canciller austríaco indicó que la UE quiere "ayudar a la gente... y no financiar otros objetivos dudosos". "No tenemos intención de cortar los fondos pero queremos garantías. Nadie puede esperar que financiemos el terrorismo o apoyemos el extremismo", consideró.
Asimismo, instó a Hamás a que, una vez que se forme el nuevo Gobierno, renuncie a la violencia, reconozca a Israel y honre los anteriores acuerdos israelo-palestinos: "Si esto no ocurre... tenemos que encontrar otros caminos" de ayuda, advirtió el canciller.
Por otra parte, Abbas afirmó en Viena que confía en que se produzcan futuras negociaciones de paz con Israel aún después de que Hamás forme un Gobierno. Sin embargo, el primer ministro israelí en funciones, Ehud Olmert, ha revelado que no tiene ninguna intención de reunirse con Abbas. Por ello, Schuessel subrayó que alcanzar la paz es una labor en la que deben participar las dos partes, aunque seguramente la UE "jugaría un papel de ayuda".
MAÑANA CON BARROSO
Mañana en Estrasburgo, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, y la comisaria responsable de Relaciones Exteriores y Política de Vecindad, Benita Ferrero-Waldner, se reunirán con Abbas, al que trasladarán el apoyo político de la UE.
"El presidente Abbas ha dejado clara su determinación de formar un Gobierno que respete sus obligaciones internacionales en los territorios palestinos y tiene todo nuestro apoyo en esta ardua labor. El objetivo principal tiene que ser poner en marcha una administración nueva que renuncie a la violencia, reconozca a Israel, y que pueda mantenerse por los acuerdos de paz existentes", ha declarado Barroso.
Por su parte, Ferrero-Waldner ha resaltado que ningún donante ha realizado más esfuerzos que la UE para estabilizar la situación financiera de la Autoridad Palestina. Según la comisaria, la UE continuará siendo un donante fiable para la población palestina, de la cual aproximadamente la mitad vive bajo el umbral de la pobreza. Bruselas destinó a principios de este mes un total de 120 millones de euros en ayudas para cubrir las necesidades básicas de la población palestina.
