RABAT, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Conferencia ministerial euroafricana sobre migración y desarrollo que se celebra hoy y mañana en Rabat (Marruecos) es una "cita para la esperanza africana" de cara a afrontar el reto de la gestión de los flujos migratorios, según recoge hoy la prensa marroquí.
"Esta cita, primera de esta clase en la región, es una oportunidad para la aplicación de algunos valores, defendidos durante mucho tiempo por Marruecos", asegura el diario 'Libération'. Por su parte, el rotativo 'L'Opinion' señala que el encuentro "debe desembocar en una nueva asociación que de importancia particular y aportar soluciones concretas a los problemas de los flujos migratorios", según recoge la agencia MAP.
Asimismo, el diario lamenta la ausencia de Argelia --principal punto de paso de los inmigrantes que parten hacia Marruecos-- en la misma, considerando que "como siempre prefiere continuar con la 'política de la fuga' y se niega a asumir sus responsabilidades".
En este sentido, 'Le Matin du Sahara et du Maghreb' destaca que esta conferencia ofrece a los Estados participantes la ocasión "de intercambiar sus experiencias en la materia con el fin de poder nivelar las dificultades que afronta hasta ahora la aplicación de una estrategia global y coherente" y recuerda "el compromiso sin falta del Reino para encauzar este fenómeno ilegal".
En este contexto, el diario publica entrevistas con el ministro de Interior francés, Nicolas Sarkozy, la comisaria europea de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero Waldner, y el director de Migración y Vigilancia de fronteras, Khalid Zerouali.
Por su parte, el rotativo 'Al Mounaataf' desea que la conferencia de Rabat logre preparar una especie de 'Plan Marshall' para el desarrollo que contribuya a remediar los problemas del continente en este sentido.
España presta especial importancia a esta Conferencia debido a las sucesivas crisis migratorias que ha sufrido sobre todo en el último año debido, en primer lugar, a las avalanchas en septiembre y octubre de 2005 de inmigrantes subsaharianos en Ceuta y Melilla y luego, por la reciente llegada masiva de cayucos a las Islas Canarias procedentes de Mauritania, Senegal y Gambia a raíz de una mayor cooperación marroquí y una mejor vigilancia marítima española en el Estrecho de Gibraltar.
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