BRUSELAS 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea propuso hoy crear equipos de expertos de la UE para que asistan a los Estados miembros que sufren presiones migratorias repentinas de demandantes de asilo, como el caso de España en Ceuta y Melilla, Italia en la isla de Lampedusa, Malta o Eslovenia. Asimismo, abogó por adoptar un enfoque común en gestión de la información de los países de origen, elemento fundamental a la hora de decidir si se acepta o no una petición de asilo.
Estas propuestas están contenidas en una comunicación adoptada por el Ejecutivo comunitario con medidas para reforzar la cooperación práctica entre los países de la UE a la hora de gestionar los problemas ligados al asilo. "Con la perspectiva de un futuro régimen de asilo europeo común, es esencial lograr una mayor convergencia, no sólo en las legislaciones, sino también en las prácticas", declaró el vicepresidente de la Comisión y responsable de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini.
"Queremos asistir a los Estados miembros que, por su situación geográfica, se enfrentan a flujos de inmigrantes que a veces son demasiado grandes para que los puedan gestionar ellos mismos", explicó el portavoz del Ejecutivo comunitario, Friso Roscam. De lo que se trataría es de activar un grupo de expertos de los Estados miembros que puedan ser enviados en caso de crisis para ofrecer apoyo logístico, legal, médico o interpretación. Estos equipos estarían activos en el primer semestre de 2007, según los planes de la Comisión.
Asimismo, Bruselas plantea la necesidad de que los países que se enfrentan a este tipo de presiones migratorias puedan acceder a fondos comunitarios de forma más rápida y con un mínimo proceso burocrático.
La otra iniciativa prioritaria consiste en acelerar la cooperación en la recogida, el uso y la evaluación de información sobre los países de origen de los demandantes de asilo. Se trata de un "elemento clave" para que las autoridades conozcan quien necesita y quien no protección internacional.
Ahora existen situaciones muy diferentes según el Estado miembro del que se trata, y el Ejecutivo comunitario propone crear un portal común donde los países puedan vincular sus bases de datos, de manera que los Estados miembros que no tengan los recursos suficientes para obtener esta información puedan beneficiarse.
A largo plazo, el objetivo de Bruselas es crear durante el segundo semestre de 2007 una base de datos europea basada en directrices comunes.
"Ello significaría que los Estados miembros puedan usar la misma información y realizar más o menos la misma evaluación. Así no tendremos enormes diferencias en el trato de casos similares, lo cual no es bueno ni para la UE ni para los demandantes de asilo, que necesitan una certeza legal", explicó Roscam.