BRUSELAS 3 May. (EUROPA PRESS) -
La comisión de Peticiones de la Eurocámara decidió hoy desestimar las quejas presentadas por organizaciones ecologistas y ciudadanas contra el puerto industrial de Granadilla, en Tenerife, y acordó cerrar el expediente sobre este caso con el apoyo de todos los grupos políticos, a excepción de los Verdes, que abogaban por seguir investigando.
Antes de que se pronunciaran los eurodiputados, un representante de la Comisión Europea informó de que el Ejecutivo comunitario aún no está en disposición de dictaminar si el proyecto respeta o no la legislación medioambiental comunitaria, si bien espera llegar a una conclusión "en el plazo breve que todo el mundo desea".
El presidente de la comisión de Peticiones, Marcin Libicki, alegó que "un debate ad eternum no serviría para nada sin aportar datos nuevos". El eurodiputado popular Carlos Iturgáiz también propuso el cierre de la queja y admitió que "es muy difícil que todos los grupos políticos estén de acuerdo". Por parte de los socialistas, Inés Ayala pidió igualmente "cerrar esta queja para evitar que los plazos se sigan dilatando". La Eurocámara investiga el puerto de Granadilla desde septiembre de 2004.
El diputado canario Javier Medina (PSOE) indicó que "la Comisión Europea tiene información suficiente al respecto". "Dejemos que tome su decisión", añadió. El también canario Fernando Fernández (PP) dio su apoyo al proyecto de Granadilla, ya que ha sufrido modificaciones "que van en la buena dirección" para no incumplir las normas comunitarias.
El diputado de los Verdes, David Hammerstein, se manifestó en contra de cerrar este caso, ya que el Ejecutivo comunitario todavía no ha tomado una decisión sobre el proyecto. A su juicio, la Eurocámara "arroja por la ventana" la posibilidad de pronunciarse sobre este tema. Hammerstein calificó de "escándalo" la "alianza contra natura" de PP y PSOE para cerrar el caso pese a las "dudas" que suscita el puerto de Granadilla.