BRUSELAS, 9 Nov. (EUROPA PRESS) - El vicepresidente de la Comisión y responsable de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini, considera que el sistema de registro de extranjeros en España a través del Número de Identidad de Extranjero (NIE) es compatible con la legislación comunitaria, aunque es consciente de que los ciudadanos de otros países comunitarios y sus familiares sufren "retrasos" a la hora de pasar por este trámite burocrático.
Así lo explicó en una respuesta parlamentaria al eurodiputado popular alemán Daniel Caspary, que preguntó al Ejecutivo comunitario si el procedimiento para obtener el NIE se ajusta a las normas europeas o por el contrario "discrimina a los extranjeros de la UE". Caspary criticó que la obtención del NIE "consume mucho tiempo" pese a tratarse de un documento "esencial para que los ciudadanos de la UE puedan quedarse en España durante un periodo largo de tiempo". Además, apuntó que "sólo se expiden 60 certificados al día".
"La Comisión es consciente de los retrasos que los ciudadanos de la UE y sus familiares sufren en España cuando intentan registrarse y obtener certificados de su registro", explicó el comisario Frattini. No obstante, aseguró que la directiva que protege la libertad de circulación y de residencia de ciudadanos europeos en algún otro país comunitario distinto del suyo "no impide a los Estados miembros exigir a los ciudadanos de la UE que residan en su territorio adquirir un número administrativo de identificación específico".
Recordó que por real decreto "la legislación española obliga a todos los extranjeros que residen en España a obtener dicho Número de Identidad de Extranjero" y que "la organización de las autoridades administrativas nacionales es competencia exclusiva de los Estados miembros".
