BRUSELAS, 31 May. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Justicia de la Unión Europea intentarán mañana lograr un acuerdo sobre la orden europea de obtención de pruebas, iniciativa similar a la conocida como 'euroorden', que permitiría a un magistrado disponer de pruebas obtenidas en otro Estado miembro. Aunque se han realizado avances desde que el asunto quedara bloqueado en la última reunión de los titulares de Justicia, el pasado 28 de abril, Alemania y Países Bajos siguen teniendo serias reservas para dar su visto bueno.
Alemania, que ha tenido problemas internos a la hora de aplicar la 'euroorden', quiere que exista una armonización previa de las definiciones de los delitos, entre ellos el de terrorismo, y para aceptar esta iniciativa plantea que no se le aplique.
Los Veinticinco estarían dispuestos a ofrecer a Berlín un periodo transitorio, durante el cual las autoridades judiciales alemanas sólo darían aquellas pruebas de los delitos previamente definidos, pero no una excepción.
La reclamación que plantea Países Bajos es aplicar un concepto amplio de territorialidad, de tal forma que se pueda denegar una determinada prueba por razón del lugar en el que se ha cometido el delito investigado. Esta posición conducirá inexorablemente a que, si un país aplica la cláusula de territorialidad, se enfrente a una actitud similar por parte de sus socios.
En ambos casos, los reparos de alemanes y holandeses cuestionan el principio mismo del reconocimiento mutuo en el que se basa la cooperación judicial en la UE e introducen elementos de "nacionalismo" judicial.
La propuesta regula el reconocimiento mutuo de las resoluciones judiciales penales referidas a la obtención de pruebas y, en principio, quedarían fuera del ámbito de la decisión marco la toma de declaraciones, bajo cualquier forma, de sospechosos, acusados, testigos o víctimas.
Tampoco incluiría las muestras de ADN, la intervención de comunicaciones, vigilancia discreta o control de cuentas bancarias, ni las pruebas que requieran de otras investigaciones complementarias, en especial la recopilación o análisis de objetos, documentos o datos existentes.
El instrumento sigue el modelo de la orden europea de detención en lo que se refiere a las cuestiones procedimentales, es decir la creación de un título judicial a nivel europeo y la transmisión directa entre autoridades judiciales y prevé suprimir el requisito de doble incriminación, basada también en un sistema de lista de delitos.
La Comisión Europea considera esta decisión como un "primer paso" para la paulatina regulación del reconocimiento mutuo de los diferentes elementos de prueba que tenga un alcance completo y estén compiladas en un sólo instrumento.
Además de intentar desbloquear este asunto, los ministros darán casi con toda probabilidad su visto bueno al procedimiento acelerado para las reclamaciones de escasa cuantía, cuyo umbral, según la última propuesta de compromiso, está situado en los 2.000 euros.
La idea es tener un procedimiento realmente barato para que nadie deje de reclamar lo que le corresponde por el hecho de que el coste del proceso sea superior a la cuantía de la demanda. A diferencia de otros instrumentos, en el Reglamento de procesos de escasa cuantía se parte de que la demanda no tiene por qué referirse al cobro de una deuda líquida, vencida y exigible, sino que puede reclamarse el cumplimiento de cualquier clase de obligación.
Habrá encima de la mesa otros dos debates de orientación, uno sobre intercambio de reclusos que puedan cumplir condena en otro Estado miembro y el segundo sobre la armonización de los derechos procesales.
PROSTITUCION EN EL MUNDIAL
Durante el almuerzo, los titulares de Justicia analizarán un asunto planteado inicialmente por Suecia y que ha sido luego objeto de una resolución del propio Parlamento Europeo para combatir la prostitución forzada durante la celebración del Mundial de Fútbol que comienza el día 9 de junio en Alemania.
Los ministros no adoptarán ninguna decisión formal pero es previsible que se comprometan a reforzar el intercambio de información durante la celebración del evento deportivo para controlar el tráfico de seres humanos, las redes y los sistemas de reclutamiento de personas que podrían ser obligadas a prostituirse.
