UE.- El Rey y Zapatero felicitan a Barroso y la Comisión por su "empeño" en la cohesión social y el desarrollo de la UE

Actualizado: jueves, 19 abril 2007 17:56

El presidente de la Comisión hace un "llamamiento" para transformar el "punto muerto institucional de Europa"

MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Rey Don Juan Carlos felicitó hoy al presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, un "reconocido europeísta y un gran amigo de España", y a la propia institución de la UE, por "ser el verdadero motor de la construcción europea", en el acto de entrega del premio que ha concedido a ambos Nueva Economía Forum 2007 al desarrollo económico y la cohesión social. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, alabó la labor de Barroso y defendió la necesidad de una Europa más fuerte, solidaria e integrada.

"La Comisión merece nuestro reconocimiento y respeto, tanto por su papel en el edificio comunitario, como por los logros cosechados al servicio de Europa y de los ciudadanos europeos", señaló el Rey durante su discurso. "Desde la puesta en marcha de políticas comunes, hasta la libre circulación sin fronteras o la creación del euro, todos los grandes avances del proyecto que compartimos casi quinientos millones de ciudadanos, han tenido una participación relevante de esta institución comunitaria", insistió. "En el caso de España, transcurridos poco más de veinte años desde nuestra adhesión, podemos afirmar que la Unión Europea ha sido un factor clave en nuestra modernización, apertura exterior y en la mejora de nuestro nivel de vida", dijo.

MÁS COMPROMISO EUROPEO

Asimismo, el monarca instó a "seguir trabajando para ser más eficaces a la hora de abordar los retos de un mundo globalizado en el que Europa debe tener un papel cada vez más cohesionado, activo y visible", para lo que instó a los Estados miembros y las instituciones a "reforzar su compromiso con la construcción europea".

Por su parte, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, también felicitó a los galardonados y destacó el papel de la Comisión Europea como "la conciencia activa, el alma viva del proyecto europeo". "Sin esa fuerza motriz, el proyecto político europeo se habría estancado, y al estancarse habría retrocedido, fracasando el intento ambicionado por sus promotores y fundadores", añadió.

Así, el presidente aseguró que España comparte "la convicción" de que "a través del diálogo entre los Estados miembros y con la colaboración de la Comisión y del Parlamento Europeo" se pondrá fin al actual "periodo de reflexión" sobre el Tratado Constitucional "con un proyecto ilusionante que ofrezca respuestas a los problemas e inquietudes" de los ciudadanos.

NECESIDAD DE UN TRATADO CONSTITUCIONAL

En este sentido, Zapatero subrayó que España no renuncia "a la ambición de construir una Europa política más integrada" porque "si lo hiciéramos daríamos un paso atrás (...) y nos costaría mucho repararlo". "Las carencias que nos llevaron a la firma del Tratado Constitucional subsisten y son incluso más evidentes en nuestros días", remachó.

Así, consideró que la solución que se acuerde "no debería alejarse demasiado ni desvirtuar el contenido del texto constitucional" firmado por todos los Estados miembros y ratificado por 18. No obstante, el presidente señaló que "como buenos europeístas debemos ser optimistas" e indicó que la UE "siempre ha encontrado fuerzas, argumentos y apoyo para superar los momentos más críticos".

Para Zapatero, la Unión Europea "debe proyectar hacia el exterior los valores" que conforman su identidad. "Los procesos económicos y sociales de la globalización, la injusticia y los desequilibrios, los movimientos masivos de poblaciones, la violencia en todas sus manifestaciones y el cambio climático (...) exigen una respuesta europea", dijo. Por ello, el presidente apostó por una Europa más fuerte, "para ser más segura", más prospera, más solidaria y más integrada.

Mientras tanto, Barroso agradeció el premio otorgado "al papel que desarrolla la Comisión a favor de la construcción europea, en la cohesión e integración de los estados miembros, en la ampliación de los derechos y libertades de sus ciudadanos y en la definición del futuro modelo político, económico y social de Europa".

El presidente de la Comisión Europea destacó que España ha jugado un papel central en la construcción europea. "Participa y contribuye con una actitud positiva y al mismo tiempo inteligente a la definición de las políticas de la Unión Europea", afirmó Barroso, antes de asegurar que él mismo se sirve muchas veces del "ejemplo español" para ilustrar "cómo puede beneficiar a un 'nuevo' Estado miembro la plena participación en la Unión y de cómo la Unión puede beneficiarse de la participación de nuevos Estados miembros".

Por otro lado, el presidente de la Comisión hizo un llamamiento "para transformar el punto muerto institucional de Europa en una oportunidad de dar nuevas fuerzas con un proyecto de madurez" que es ahora "tan indispensable como hace cincuenta años". Según Barroso, se trata de una "necesidad real, más urgente que nunca".

Así, para Barroso, Europa debe convertirse en "el motor en la era de la globalización", para lo que debe desarrollar su eficacia en la escena política internacional, consideró.

El acto, celebrado en el Teatro de la Zarzuela también contó con la presencia de los dos vicepresidentes del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega y Pedro Solbes, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos, y el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, entre otros. Además, asistieron representantes del mundo diplomático, entre los que estaba el director de la Representación en España de la Comisión Europea, José Luis González Vallvé.