BRUSELAS 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
El alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y la Seguridad Común, Javier Solana, y el secretario general del Consejo de Seguridad Nacional iraní, Ali Larijani, se reunirán mañana día 6 de julio en Bruselas después de que Solana llamara por teléfono al negociador del programa nuclear iraní tras saber que Teherán cancelaba la visita prevista para esta tarde en la capital comunitaria, según informa el Consejo Europeo en un comunicado.
"Me sorprendió escuchar que el Dr Ali Larijani, Secretario General del Consejo de Seguridad iraní, decidió en el último minuto posponer su viaje a Bruselas, tal y como habíamos acordado previamente que se celebrara hoy. He dejado claro ante los iraníes y a Larijani que queremos pasar rápidamente a examinar conjuntamente las ideas que le expuse a principios del mes pasado", indica Solana en el comunicado.
"Acabo de hablar por teléfono con Larijani y hemos acordado vernos mañana en Bruselas y continuar nuestras discusiones el martes 11 de julio", añade el texto.
Por su parte, la portavoz de Exteriores del Ejecutivo comunitario, Emma Udwin, aunque recordó que la Comisión Europea no forma parte de las negociaciones, expresó su "desacuerdo" con la lentitud de los iraníes para responder a la oferta europea.
"Nosotros y otros socios de la UE hemos expresado nuestro desacuerdo con la lentitud con la que Irán está respondiendo al paquete que se le ha ofrecido por parte de la UE y los socios de la comunidad internacional", dijo Udwin."
Creemos que es importante que haya una respuesta pronto y espero que la reunión prevista para hoy pueda ser reprogramada", agregó. Solana tenía previsto entrevistarse con Lariyani para conocer la respuesta de Teherán a la propuesta de incentivos que le presentó la comunidad internacional el pasado 6 de junio a cambio del abandono de su programa de enriquecimiento de uranio. Se trata así de "sondear" si Teherán está dispuesto a negociar la paralización de sus programas nucleares.
El Alto Representante europeo viajó a Irán para entregar al Gobierno de Mahmud Ahmadineyad la propuesta con la que los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, Rusia, China, Reino Unido y Francia), más Alemania, tratan de convencer a Irán de que abandone los programas de enriquecimiento de uranio. Desde un primer momento, Teherán no se mostró en desacuerdo con la propuesta, aunque mostró sus reticencias a aceptarla definitivamente. De celebrarse, la de mañana sería la primera reunión después de la presentación de la propuesta.