BERLÍN, 5 Dic. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Rosa Aranda) -
La canciller federal, Angela Merkel, el presidente francés, Jacques Chirac, y su homólogo polaco, Lech Kaczynsky, se han reunido hoy en localidad alemana de Mettlach, en la región del Sarre, en el marco de los encuentros periódicos del 'Triángulo de Weimar' que celebran estos tres países de forma regular, y han destacado la necesidad de que Turquía ratifique el Protocolo de Ankara.
Mientras Kaczynski ha reiterado la posición de Polonia a favor de la entrada de Turquía en la Unión Europea, Merkel ha subrayado solamente la necesidad de que ese país ratifique el Protocolo de Ankara abriendo así sus puertos y aeropuertos a Chipre y de que la Comisión informe sobre el estado de las negociaciones con Turquía entre el otoño de 2008 y la primavera de 2009.
"No queremos que se hable de endurecimiento de las condiciones para su adhesión, ni de un ultimátum a Turquía", dijo Merkel en una rueda de prensa al término de la reunión. Turquía firmó el Protocolo de Ankara pero no lo ratificó, reiteró.
Jacques Chirac aseguró que "Francia es exactamente de la misma opinión que Alemania y manifestó que "lamentamos que no se hayan registrado progresos en las negociaciones aunque confiamos en llegar finalmente a una solución".
Chirac reiteró por otra parte la urgencia de que Rusia levante el veto a la carne de Polonia y de que éste país levante también el bloqueo que impide el convenio energético entre la Unión Europea y Rusia. "Las negociaciones con Rusia es esa dirección tienen que reiniciarse lo antes posible", indicó el presidente francés.
El encuentro del 'Triángulo de Weimar' estaba previsto para el pasado mes de julio en la ciudad alemana de Weimar, pero por indisposición del presidente polaco fue necesario aplazarla. En la presente reunión en Mettlach se celebra además el 15 aniversario de la firma en Weimar de la declaración conjunta de las 3 naciones para trabajar en común.
En este sentido, los tres dirigentes políticos destacaron sus esfuerzos y logros comunes en materia de seguridad y defensa, esfuerzos que según indicaron, se ven plasmados en las misiones en las que participan en Líbano, República Democrática del Congo y Afganistán, aunque aseguraron que quieren aumentar su cooperación. De hecho anunciaron su interés en fundar una especie de "unidad de defensa común" e incluso una escuela de diplomáticos conjunta.
Asimismo, los políticos recordaron en la rueda de prensa en Mettlach la importancia del papel 'Triángulo de Weimar' en la Europa actual para fortalecer la posición de la UE en el mundo.
Además de ello, Chirac recordó los progresos que han hecho Francia, Alemania y Polonia de forma común en los terrenos de la energía, la investigación y la innovación, aunque recordó que el objetivo de Francia, Alemania y Polonia es aumentar la cooperación en proyectos de innovación.
Mediante el sello del 'Triángulo de Weimar', Alemania, Francia y Polonia decidieron crear una estructura de colaboración para facilitar la integración de la Polonia poscomunista en las estructuras euroatlánticas y, sin mencionarlo claramente, acabar con las inquietudes polacas frente a la reunificación alemana.
Desde 1991, Alemania, Francia y Polonia llevan a cabo reuniones conjuntas, cuyo objetivo es el éxito de la ampliación del Este de la Unión Europea y servir para continuar el desarrollo de la coordinación política de la comunidad de países.
Después de la entrada de Polonia en la UE, el punto principal del 'Triángulo de Weimar' se ha convertido en el trabajo en común de los tres países en el marco de la OTAN y la UE.
Sin embargo, en los últimos años el comportamiento de los Gobiernos de los tres países europeos en el ámbito internacional fue muy diferente. Un ejemplo de ello fue la guerra contra Irak: mientras Alemania y Francia fueron fuertes opositores, los polacos se mantuvieron fieles a Estados Unidos.
Otro tema de fricción que volvió a aparecer en las conversaciones de hoy es el gaseoducto del Báltico que Alemania y Rusia quieren construir pero al que se opone Polonia por ver amenazados así sus intereses energéticos.
Esta mañana en el Sarre se trató también la situación actual en Oriente Próximo, la necesidad de pacificación en el Líbano y la ayuda financiera que ha de enviarse para su reconstrucción.
