MADRID 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha alertado este lunes de que el "atroz conflicto" que atraviesa República Centroafricana, escenario de violentos enfrentamientos interreligiosos, afecta ya a 2,3 millones de niños que se han convertido en testigos de "terribles actos de violencia".
El director ejecutivo de UNICEF, Anthony Lake, ha lamentado que, "durante mucho tiempo, la vida de los niños en República Centroafricana no ha contado ni contará en esta crisis olvidada", pero ahora "los hechos están delante de nosotros".
"Los niños están siendo asesinados por ser cristianos o musulmanes. Se ven obligados a huir de sus hogares y se esconden aterrorizados para evitar a los combatientes", ha denunciado, en un comunicado en el que ha advertido de que hasta 6.000 menores podrían estar siendo reclutados por grupos armados.
Para Lake, esta violencia contra la infancia es "una afrenta a la humanidad" y ha instado a la comunidad internacional a "hacer más". No obstante, se ha dirigido de forma especial a "aquellos que están participando en la violencia" para que protejan a la población civil.
El director de UNICEF ha recordado que "la responsabilidad final para acabar con este conflicto cruel y amargo y detener el abuso de los niños" recae en las partes enfrentadas, es decir, en los miembros de la rebeldes musulmanes de la alianza Séléka y las milicias cristianas 'anti balaka'.