Vaticano.- AI se defiende de las críticas del Vaticano y asegura que sólo defiende el aborto seguro en algunos supuestos

Actualizado: jueves, 14 junio 2007 17:48

MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -

La ONG Amnistía Internacional (AI) se defendió hoy de las críticas realizadas ayer por el cardenal y presidente del Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz del Vaticano, Renato Martino, quien dijo que tanto los fieles como las organizaciones católicas "deberían retirar su apoyo" a esta organizaciónas por su a política a favor del aborto en determinados casos, asegurando que no mantiene ninguna política proaborto sino que defiende que se le practique de forma segura cuando una mujer quiere interrumpir el embarazo en determinados supuestos.

En una entrevista concedida al semanario americano 'National Catholic Register', Martino consideró que con esa decisión, AI "ha traicionado a su propia misión" y "a los colaboradores creyentes que la han apoyado a lo largo de estos años", quienes "habían confiado en la misión integral de AI a favor de la promoción y protección de los Derechos Humanos".

Según Martino, los esfuerzos de AI por justificar el aborto en caso de violación o peligro para la vida o la salud de la madre son moralmente indefendibles.

"La Iglesia enseña que matar una vida humana inocente nunca es justificable. El aborto es un asesinato", aseveró. Justificar el aborto, incluso en los casos de violación, "es definir al niño inocente que está en el interior del útero como un enemigo, como una cosa que debe ser destruida". "¿Cómo podemos decir que matar a un niño en según que casos está bien y en otros está mal?, añadió.

Desde la sección italiana de AI (www.es.amnesty.org), se alegó que la organización "no ha recibido nunca financiación del Vaticano o de organizaciones que dependan de la Iglesia Católica". Mediante un comunicado, la ONG recordó que en su estatuto internacional se declara "independiente de gobiernos, partidos políticos, iglesias, confesiones religiosas, organizaciones, entes y grupos de cualquier género".

Asimismo, señaló que la política de AI en materia de aborto tiene su origen en la campaña contra la violencia hacia las mujeres. Entre otras cosas, define que reclamará a los Estados "garantizar el acceso a los servicios legales y seguros para el aborto a todas aquellas mujeres cuyo embarazo se deba a una violencia sexual o a incesto, o en caso de que conlleve un riesgo para su vida o su salud".

No obstante, AI "no llevará a cabo ninguna campaña general en favor del aborto o de su legalización general" ni tampoco juzgará "si el aborto es justo o injusto", añadió la nota.

SUPUESTO DE VIOLACIÓN

En esta línea, en declaraciones a Europa Press, la responsable de Campañas e Investigación de AI en España, Eva Sorellanos, defendió el aborto practicado de forma segura cuando una mujer quiere interrumpir el embarazo en determinados supuestos como por ser fruto de una violación, un incesto o cuando la madre corre grave peligro.

"No llamamos a nadie a abortar", afirmó y reclamó que se dé una información "completa" a hombres y mujeres sobre salud sexual y que se deroguen las leyes penales que permiten acusar, encarcelar o sancionar a mujeres por abortar.

"Sólo queremos garantizar el aborto seguro en casos de agresiones sexuales, incesto o grave riesgo para la salud de la madre", añadió, asegurando que la política de esta organización está "solidamente" enmarcada en las declaraciones internacionales de Derechos Humanos.

Como ejemplo de sus actuaciones en este ámbito, explicó que AI trabaja así en países como República Democrática del Congo y Sudán para ayudar a mujeres embarazadas por violación, práctica utilizada --a su juicio-- "como arma de guerra" en estos estados. En Nigeria, lucha por que se elimine la pena de muerte para las mujeres que aborten y en México, que las que hayan abortado tras una violación tengan la posibilidad de acceder al servicio sanitario legal.

Finalmente, Sorellanos también quiso aclarar un "malentendido" explicando que AI no recibe financiación de ningún gobierno ni del Vaticano ni la Iglesia católica, puesto que se trata de una organización "independiente" de ideologías políticas y religiosas, con lo que únicamente recibe aportaciones económicas de sus socios y simpatizantes.