ROMA, 12 Jul. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -
El ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, afirmó hoy que "no hay que dar ninguna explicación" sobre la decisión de un presidente de asistir o no a un oficio religioso, en referencia a la ausencia de José Luis Rodríguez Zapatero en la misa que ofició el Papa Benedicto XVI durante su visita a Valencia. En este sentido, añadió "que nada y nadie puede criticarle por ello".
El ministro comentó, al margen de una rueda de prensa tras su visita a Roma, que "el Gobierno escucha con respeto" estas críticas, pero que "en los actos institucionales de la Iglesia Católica garantiza una representación que estima adecuada y que la presencia de dos ministros en los actos litúrgicos lo pone de manifiesto".
Así se refirió López Aguilar a la decisión del Ejecutivo de que tanto él como el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos representaran al Gobierno durante la misa.
"El presidente del Gobierno ha recibido con todo respeto al Papa a su llegada al territorio español y después sostuvo una entrevista bilateral que todos los interlocutores y la representación de la Santa Sede calificó de cordial, positiva y alentadora para la mejora de la confianza y cooperación para sacar adelante asuntos en las que ambas partes están llamadas a dialogar y entenderse", puntualizó López Aguilar.
El ministro comentó, además, que en la despedida del Papa estuvieron también el Rey y los dos ministros, "lo que pone de manifiesto el que es un comportamiento habitual en las relaciones bilaterales y con los máximos mandatarios de las naciones".
Asimismo, López Aguilar comentó que en lo que se refiere a su competencia "la relación de cooperación entre el Estado, el Gobierno y los poderes públicos españoles y la Iglesia católica es de largo recorrido y muy positiva".
"Por parte del Gobierno existe la disponibilidad permanente de escuchar y cooperar, en el marco de Estado aconfesional donde ninguna religión tiene prioridad y existe un pluralismo religioso", puntualizó.
