PARÍS, 7 May. (EUROPA PRESS/Salvador Martínez) -
La victoria del candidato de la formación política gubernamental Unión por un Movimiento Popular (UMP), Nicolas Sarkozy, se debe al voto mayoritario que ha recibido en las regiones del este y del norte francés, según revela el mapa electoral de los resultados de la segunda y decisiva vuelta de las elecciones presidenciales francesas, celebrada ayer.
En el suroeste y en el oeste galo la mayoría del electorado prefirió a la perdedora del escrutinio, la aspirante del Partido Socialista (PS) francés, Ségolène Royal. De las 22 regiones francesas metropolitanas y Córcega, 16 votaron mayoritariamente por Sarkozy y las otras 6 lo hicieron por Royal.
Prueba del apoyo del electorado con el que ha contado Sarkozy es que, en el norte de Francia, Royal sólo se impone en un departamento, en Paso de Calais, situado en la región francesa de Norte-Paso de Calais, donde el 52,04 por ciento del electorado apoyó su candidatura.
La capital de esa región, bastión tradicional del socialismo francés, Lille -- ciudad de la que Martine Aubry, la 'madre' de la ley de las 35 horas, es alcaldesa--, votó mayoritariamente por la aspirante de la izquierda, al apoyar la candidatura del PS francés con un 55,92 por ciento de los votos.
No obstante, la suma de los sufragios registrados en la región de la que es capital Lille favorece a Sarkozy, quien obtiene un 50,3 por ciento de los sufragios, una ventaja de tres décimas sobre la aspirante socialista, que consuma en esta elección presidencial una derrota insólita en una región que históricamente ha votado siempre de manera mayoritaria por el candidato de la izquierda.
Esta región, tendente en las últimas citas con las urnas al voto a favor la formación de extrema derecha Frente Nacional, ha sido recuperada por la UMP a través de su candidato, según señaló a la radio francesa 'France-Info' el director del centro de investigaciones políticas del Instituto de Estudios Políticos de París, Pascal Perineau.
En Picardía, región adyacente a la de Norte-Paso de Calais, Sarkozy también logró una holgada victoria con un 54,4 por ciento de los votos, un hecho que manifiesta, del mismo modo que su victoria en la región de Lorena, que Sarkozy se ha hecho con un electorado de marcada tradición obrera como es el norte de Francia.
El presidente electo podía contar con imponerse en Alsacia, como lo ha hecho. Esta región del este francés es el bastión del "sarkozismo", pues en ella Sarkozy alcanzó su mejor resultado, el 65,5 por ciento de los votos escrutados.
Otras regiones cuyo electorado está compuesto por cuadros y ejecutivos, como Ródano Alpes o Isla de Francia, también han votado mayoritariamente por Sarkozy. En Isla de Francia, Sarkozy se impuso en cinco de los siete departamentos que la constituyen, incluidos París, ciudad cuya alcaldía está en manos de un socialista, Bertrand Delanoë, y en la que un 50,19 por ciento de los electores votó por el actual presidente electo.
El suroeste y en buena medida el oeste francés votó por Royal. Así la aspirante socialista se impuso en las regiones de Pirineos Centrales, Aquitania, Auvernia, Poitou Charentes --que ella misma preside --, Bretaña y Lemosín. En esta última región, la candidata socialista registró su mejor resultado al imponerse con casi un 55 por ciento de los sufragios escrutados.
