MADRID, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Javad Zarif, ha afirmado este miércoles que el acuerdo alcanzado entre Teherán y el Grupo 5+1 sobre su programa nuclear "ha redirigido la situación y va camino de la resolución del problema".
"El camino, que nos fue impuesto y caminaba hacia la confrontación, ha sido detenido y redirigido hacia la solución. Uno no puede amenazar a Irán y a los iraníes con presiones, intimidaciones y amenazas", ha sostenido.
En virtud del acuerdo, Irán se ha comprometido entre otros a detener el enriquecimiento de uranio por encima del 5 por ciento y a desmantelar las conexiones técnicas necesarias para enriquecer uranio por encima de este porcentaje, así como a neutralizar su almacén de uranio enriquecido cerca del 20 por ciento, diluirlo hasta por debajo del 5 por ciento o convertirlo a una forma no apta para el mayor enriquecimiento.
Asimismo, Teherán se ha comprometido a detener el avance de su capacidad de enriquecimiento de uranio, comprometiéndose a no instalar nuevas centrifugadoras de ningún tipo, a dejar inoperativa la mitad de las centrifugadoras en la central nuclear de Natanz y tres cuartas partes de las instaladas en Fordow y a detener cualquier tipo de actividad en el reactor de agua pesada en Arak. Teherán también se compromete a dar acceso a los inspectores de la AIEA.
Irán ha obtenido por su parte el reconocimiento a su derecho a enriquecer uranio para fines pacíficos, la suspensión de "ciertas sanciones" referentes al oro y a los metales preciosos, al sector automovilístico y a las exportaciones petroquímicas y se permitirá la adquisición de petróleo iraní aunque todavía de forma limitada, entre otros. Tampoco se impondrán nuevas sanciones contra Irán por su programa nuclear en los próximos seis meses si Teherán cumple con sus compromisos.
Asimismo, ha criticado al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por sus continuos ataques al acuerdo entre ambas partes. "Si Netanyahu teme lo que describe como 'acceso de Irán a las armas nucleares', ¿por qué está preocupado por una interacción que demuestra que Teherán no busca hacerse con ellas?", se ha preguntado.
"Lo que le preocupa (a Netanyahu) es la imagen falsa que ha presentado sobre Irán, que había convertido en una tapadera para justificar sus crímenes y su posesión de armamento nuclear en Oriente Próximo", ha remachado, según ha informado la cadena de televisión iraní Press TV.
Israel, que no es miembro del Tratado de Proliferación Nuclear (TNP), mantiene una política de "opacidad nuclear" y nunca ha reconocido ni desmentido poseer armamento nuclear, aunque el ex técnico nuclear Mordekai Vanunu reveló detalles del programa nuclear israelí a la prensa británica en 1986.
A día de hoy, las estimaciones apuntan a que Tel Aviv posee entre 75 y 400 ojivas nucleares y que tiene la capacidad de lanzarlas por medio de aviones, submarinos o misiles balísticos intercontinentales.
Teherán ha manifestado en varias ocasiones que un ataque militar israelí contra sus instalaciones sería una violación flagrante del TNP y debería provocar la respuesta de los miembros firmantes del tratado.
Además, ha apuntado que cualquier ataque justificado por su programa nuclear sería una agresión injustificada, ya que el TNP defiende el derecho de los países a desarrollar energía nuclear para fines pacíficos.